Algunos analistas consideran que Donald Trump no impondrá finalmente los aranceles o no la mayoría de ellos. Señalan que sólo los usa como presión contra Canadá y México para lograr reducir el tráfico de drogas, la migración hacia su país, y una mejor renegociación del T-MEC.  Pero si los llega a aplicar, de acuerdo con Sergio Ponce, director general de la Cámara de Comercio Estados Unidos-México, capítulo Guanajuato, ellos propiciarían  un aumento en los costos de producción, el que las empresas pierdan diversos activos y flujos de efectivo, lo que ocasiona reducción en la oferta laboral y despidos, endeudamiento por parte de las empresas, dificultad para conseguir créditos  y reducción en la competitividad. Con información de Charlene Domínguez en «Reforma»