El Papa Francisco llevó a Robert Prevost al Vaticano y lo puso al frente del Dicasterio para los Obispos, uno de los más influyentes de la Iglesia católica- es el que selecciona a los obispos- confiando en que continuará el trabajo de una iglesia participativa y corresponsable, más misionera y menos clerical. Francisco lo colocó en la ruta del papado, que llevó finalmente a la decisión de este jueves y que León XIV, como el Papa San León I hace mil 500 años, restablezca la estabilidad en el Vaticano. Lo escribe Raymundo Riva Palacio en «El Financiero». Foto de Instagram.