Ventana del soneto. Vientre de arcilla que moldea mi boca, cabellera de fuego va a mi pecho, ojos de miel que brillan al acecho, el temblor de tus manos me provoca. El viento va fugaz porque te toca, eres el paso de un camino estrecho en el abismo hondo de mi lecho y ruedas sobre mí como una roca. Voy hasta el centro de tu alta sombra, tu corazón se agita y se percata que muere en ti el silencio que me nombra como lluvia que vierte luz de plata como rayo que cruza y que te asombra como tu vientre que me incendia y ata. Por Manuel Antonio Santiago. Foto de Víctor León.

Juan Armenta escribió un artículo sobre la señora Portilla nacida en 1915 y a quien alguna vez entrevistó. Ella Le platicó que en su época "se usaban vestidos vaporosos de telas importadas, buenos perfumes, encajes peinetas, medias de popotillo, peinados sofisticados. Y en el baile, recuerda la señora Portilla, empezaba la música. Y como que el tiempo detenía ese gran momento. Las parejas iban al centro del salón. El caballero llevaba a la dama  tomada del brazo. Y los dos quedaban de frente mirándose a los ojos.. El caballero rodeaba el talle de la cintura de la dama con su mano derecha. Y con la mano izquierda el caballero afianzaba la mano derecha de la dama. Ambos sentían, por la cercanía, vibraciones en todo su cuerpo. Empezaba el movimiento corporal y espiritual al ritmo de la música. y se frotaba entre nubes en un mágico instante de romanticismo puro. Y se coreaban calladamente las estrofas de esa bella canción "Noche de una en Xalapa". Y se vivía intensamente ese espacio repleto de amor". Es una parte de lo que escribió Juanito.

No tome a mal esta expresión, nada más es un coloquialismo para transmitir mi amor, mi debilidad, vamos, por este sagrado alimento, también popularmente conocido como blanquillo. No sé si ustedes, estimados lectores también padezcan esa debilidad, en mi caso lo traigo en mi ADN, seguro lo heredé de mi padre que, no obstante ser un consumado devorador del producto de gallina, solo unos cuantos meses lo separaron de vivir hasta los 90 años de edad. Desde que recuerdo, mi papá era feliz desayunando, comiendo y cenando huevos. Era tal su afición, que en los años 70 algunos de los huevos que se compraban en el mercado para la casa solían traer dos yemas, bueno, pues ese capricho de la naturaleza era suficiente para que los ojos le brillaran como si hubiera descubierto un tesoro. Lo mismo sucedía cuando una gallina de rancho era sacrificada por mi madre y al destazarla se encontraba con que venía cargada de lo que en ese entonces se llamaba “huevera”, a mi papá le encantaba el consomé rebosado de esas yemas en plena formación ‘huevuna’. Pese a la mala fama que le crearon, los mexicanos somos campeones mundiales en su consumo, nos comemos nada más 23.3 kilogramos en promedio de blanquillos al año, o sea aquello de que era uno de los causantes del colesterol en el ser humano nos tiene sin cuidado. No solo en México sino en el mundo entero ha recuperado su estatus como el ingrediente cardinal de numerosos guisos de los cuales un servidor es devoto: tortilla española, tortilla a la mexicana, tortilla francesa, tortilla de mariscos, omelette, frittata (italiana), rotos, estrellados, fritos revueltos tiernos, motuleños, en salsa, con frijoles, divorciados, rancheros, a la mexicana, tirados, a la albañil, cocido, pasado por agua, con arroz, preferentemente rojo; en capeados, en sopa china, cocido con yema líquida y en postres como natillas, mousse, leche quemada, crema catalana, torta de elote, tarta de Santiago y ¡rompope!… y la yema cocida pero líquida es deliciosa simplemente con un trozo de hogaza de pan. Bueno, el huevo es tan pero tan chingón, que los griegos y romanos lo utilizaban para pegar baldosas. No coma huevo a huevo, hágalo por gusto, es un alimento maravilloso. Foto de TVP. Lo escribe Marco Aurelio González Gama, directivo de este Portal.

1) "He descubierto que no hay forma más segura de saber si amas u odias a alguien que hacer un viaje con él. 2) Yo no temo a la muerte. Estuve sin vida miles y millones de años antes de nacer, y no sufrí problema alguno por ello. 3) Un banquero es un señor que nos presta un paraguas cuando hace sol y nos lo quita cuando empieza a llover. 4) Básicamente hay dos tipos de personas. Las personas que consiguen cosas y las personas que dicen que han conseguido cosas. El primer grupo es menos frecuente. 5) La única manera de conservar la salud es comer lo que no quieres, beber lo que no te gusta y hacer lo que preferirías no hacer. 6) Honestidad, la mejor de todas las artes perdidas. 7) El hombre es un experimento, el tiempo demostrará si valía la pena". Son de Mark Twain. Las publican en "El Club de los Libros Perdidos" y lo subió Marco Antonio Roa al Facebook.

Desde mis primeras visitas a Xalapa, allá a mediados de los sesentas, cuando mi horizonte musical era bastante reducido –sigue siéndolo, pero ya no tanto-, algunas de las sensaciones primarias de aquellos iniciales contactos con la capital del estado fue de que en Xalapa se escuchaba buena música. A donde quiera que iba siempre había música de fondo y me acuerdo que aquí escuché por primera vez a Astrud Gilberto, Elis Regina y Antonio Carlos Jobim, mucho Bossa-nova, que era como que la corriente musical dominante entre los xalapeños, fundamentalmente entre el estudiantado. Más tarde tuve oportunidad de escuchar a Orbis Tertius, que era un grupo de Jazz sensacional al que comandaba el gran Memo Cuevas y también por esos años eran muy populares en la capital los Hermanos Castro -¡faltaba más!- con sus ‘Más que nada’, ‘Yo sin ti’, ‘Perdiendo la razón’ y todos esos súper exitazos que los llevaron a triunfar hasta en Las Vegas, total, que para qué les cuento más, Xalapa es una ciudad musical, con una gran tradición de música apoyada principalmente porque es la sede de la Orquesta Sinfónica, de la Orquesta de Música Popular, del Ballet Folclórico de la UV y, en fin, todo lo que yo y usted conocemos y tenemos por bien sabido.  Adicionado ahora con la Orquesta Municipal de Xalapa y los grandes eventos musicales que organiza la Dirección de Cultura. Lo escribe Marco Aurelio González Gama, directivo de este Portal.

Desde siempre he seguido al mundo del diseño y de la moda, principalmente de la femenina. Y es que el diseño de modas y su confección me parecen, y salvo la mejor opinión de los lectores, la más acabada expresión y evolución del arte contemporáneo, y de una artesanía que se renueva día a día con el propio diseño, pero también con los materiales, colores y tendencias de los tejidos y estampados. Las mejores colecciones de Ives Saint Lauren merecen, sin duda, una sala en cualquier museo de arte moderno, y si está en París, mejor. Los nombres de los grandes diseñadores, al menos de los sesentas para acá son parte de la visión que tengo del mundo. No hay diferencia entre Givenchy y Dalí, por ejemplo. A propósito de ello, la playera (www.farfetch.com) que enmarca este Carrusel, que es una playera tipo polo de manga larga, entretejida, eso sí de seda 100% la puede usted pedir a domicilio, nada más cuesta 50 mil pesos. La prenda es de un tipo sorprendente, Tom Ford, un multi talento –todo terreno- de esos que nada más se da cada 100 años. El estadounidense (Austin, Tx., 27 de agosto de 1961) marca el ritmo de la moda en el mundo. Irrumpió en ese universo de manera definitiva en la década de los ochenta cuando la firma italiana Gucci lo incorporó a sus filas como director creativo. Pero su campo de acción abarca todos los campos del diseño: todo, absolutamente todo en prendas y accesorios femeninos, y para los hombres ahí se va dando. En materia de diseño en serie me parece que sus prendas rompen todo lo imaginable en cuanto a precio: chamarras de piel de 200 mil para arriba, zapatos para hombre en 30, 40, 50 y hasta más, una fragancia para caballero, ¿en cuánto le gusta, 16 mil pesotes?, y ya no hablemos de corbatas, trajes y blazers, impagables. Ford ha incursionado en el cine como director, su película ‘Single Man’ (2009) protagonizada por Colin Firth recibió grandes elogios de la crítica especializada. Lo escribió Marco Aurelio González Gama, directivo de este Portal.

Fue un jueves, 30 de enero de 1969, cuando los (The) Beatles dieron su último concierto como banda de rock and roll. Fue un día típico de la capital británica en la época invernal, frío, seco, con una temperatura que calaba los huesos y entumía las manos. Fue en el número 3 de la calle de Savile Row, perteneciente a un céntrico distrito de Londres en donde el célebre cuarteto tenía la sede de las oficinas de su disquera Apple y su estudio de grabación. Todo fue improvisado, los años de la taberna ‘The Cavern’ habían quedado atrás, ya eran conocidos y escuchados en todo el mundo –eran más conocidos que Jesucristo- y los hijos, las esposas –Yoko Ono había irrumpido de improviso sembrando la discordia, según algunas versiones-, la guerra de las vanidades, las discusiones acaloradas y las ansias de cada uno de hacer su propia historia a través de su música y la manera de concebir al género rockero, impulsaron a la legendaria banda a grabar su último disco y película ‘Let it be’ (1970). Ahí quedaron para la posteridad las grabaciones de la mítica agrupación audicionando en la azotea del vetusto edificio, acompañados en el piano eléctrico del ‘quinto’ beatle, Billy Preston y como su arreglista y manejador de cabecera, Sir George Martin. Al final del concierto, Lennon dijo: “Me gustaría dar las gracias en nombre del grupo y de nosotros mismos, y espero que hayamos pasado la audición". En la sesión que duró 40 minutos, grabaron: Get Back, Don't Let Me Down, I've Got a Feeling, One After 909, Dig a Pony y Let it Be. Hoy, medio siglo después, lo que fue la sede de Apple Records es una tienda de ropa para niños. El que escribe este recuerdo, rememora emocionado y con los ojos humedecidos cuando vio la película en el no menos mítico y céntrico cine Isabel del pueblo que lo vio nacer, allá por el 71 o 72, a la tierna edad de los 12 o 13 años. Foto de "Animal Político". Lo escribe Marco Aurelio González Gama, directivo de este Portal.

"De plaza del rey, tianguis de los burreros, plaza de armas donde se juramentó la Constitución de Cádiz, a un mercado donde la historia y el desarrollo de Xalapa se unen en el “Jáuregui”, nombre adoptado por el altruismo de uno de los ibéricos que encontraron en este “manantial en la arena” su casa. A la llegada de los españoles, Xalapa era sólo cuatro barrios a su entorno a las orillas del Macuiltépetl, vestigios de templos hoy en ruinas como ruta de paso y de acuerdo a historiadores, se formó como una opción para descansar cuando las diligencias se dirigían de Veracruz a la Ciudad de México. Al crecer, el asentamiento que recibió su Cédula Real en 1791 creada en su mayoría por españoles, criollos y nativos según los escritos “editados en la universidad veracruzana, como el de “historia de jalapa siglo xvii”, se asienta en los registros históricos del que fuera el convento franciscano erigido en 1591 un centro de comercio, para dar la bienvenida a los participantes de las ferias que duraban hasta tres meses. Ahí intercambiaban productos de las haciendas y los cultivados en las rentas… pasó el tiempo y en 1879 primero fue un espacio ubicado a un costado de lo que fuera la plaza del rey, donde se erigía una fuente y sitio donde se juró la Constitución de Cádiz explica el historiador Rafael Martínez…fue entonces que surgieron los mercados. De ahí el mercado se reconoció como “El Jáureguí”, adoptando el nombre del español Martín que donó el espacio en gratitud a Xalapa…era un espacio que era la mitad de extensión de lo que hoy ocupa el mercado recuerda José Adrían Sánchez Hernández, tercer generación de locatarios del mercado hasta 1951 hecho pleno de mitos. El mercado fue reinaugurado en 1959, uniéndolo con el “Gonzalo Vázquez Vela”, juntos se hicieron uno; casi a la par de su reconstrucción el hoy emblemático puente de Xalitic, que los rumores dicen fue hecho con material resultante de los mercados siniestrados, cuatro arcadas a medio punto que unieron a esta parte de Xalapa. Esta central de abasto funciona hasta la fecha como el principal proveedor de legumbres, flores, carnes en general y referente en temas esotéricos y de herbolaria… ahí se han visto cambios desde la inauguración con delimitaciones de espacio y reglas de trabajo para permitir el paso de los marchantes que asisten a hacer la despensa o a degustar sus tradicionales platillos. Además, sin pretenderlo, es guardián de la primer obra mural de Norberto Martínez, pintor nacido en Rodríguez Clara y que plasma en mosaicos de vitricota el comercio, evocando diferentes etapas, desde la época prehispánica. El mercado hoy, como desde su fundación esta flanqueado por la comisión geográfica exploradora, después cuartel del 61 Batallón de Infantería, y hoy, Oficina de Hacienda Federal tras algunos años de estar sin uso de lado de la calle de El Calvario (hoy Revolución) y el Barrio de Xallitic, un referente en Xalapa y su historia". Lo escribió Juan Carlos Igartúa en Facebook. Foto de "Xalapa antiguo".

1) "Te diré un gran secreto, mi amigo, no esperes por el juicio final: pues tiene lugar cada día": Albert Camus. 2) "Toma para tí los consejos que das a otros": Tales de Mileto. 3) "Si quieres conocer a una persona, no le preguntes lo que piensa sino lo que ama": San Agustín. 4 "No te apresures. No te preocupes. Estás aquí sólo en una corta visita, así que no olvides detenerte y oler las flores": Walter Hagen. 5) "Mira a las estrellas, pero no se te olvide encender la lumbre en tu hogar": Proverbio alemán. 6) "Si quieres que tus hijos tengan una vida tranquila y segura, edúcalos con un poco de hambre y un poco de frío: Proverbio chino. 7) "Si quieres que algo se haga, encárgaselo a una persona ocupada": Proverbio chino. 8) "Piensa como un hombre de acción y actúa como un hombre de pensamiento": Henri Bergson. 9) Preferible que el consejo preceda la acción, a que el arrepentimiento la siga": Demócrito. 10) "Nunca debe uno resistirse a las llamadas de la intuición": Alexis Carrel. 11). "No trates de guiar al que pretende elegir por sí mismo su camino": William Shakespeare. 11) "No pidas a la divinidad lo que no puedas conservar una vez obtenido". Demócrito. 12) "No te contentes con alabar a las gentes de bien, imìtalas". Isócrates. 13) "No hay que levantar el pie sino hasta que el otro está firme": Jorge Icaza Coronel.

Es un gran libro, se puede tomar como una novela histórica, como una historia novelada o como la "historia ficcionada", de cualquier modo como la tome o lea, es una gran historia narrada de manera magistral por Fernando del Paso, que nos remonta a ese breve y trágico periodo de la historia de México, de nuestra historia nacional, de un pasaje único, ¿notable, execrable?, en donde los afanes imperialistas de unos cuantos propiciaron la aventura trágica de la pareja imperial que integraban Maximiliano y Carlota, que en el pecado llevaron la penitencia. "Noticias del imperio", desde la descripción boyante que hace Carlota de sí misma y de sus "espumosos" y airosos galardones nos atrapa: "Yo soy María Carlota de Bélgica, Emperatriz de México y de América. Yo soy María Carlota Amelia, prima de la Reina de Inglaterra. Yo soy Carlota Amelia, mujer de Fernando Maximiliano José, Archiduque de Austria, Príncipe de Hungría y de Bohemia, Conde de Habsburgo, Príncipe de Lorena, Emperador de México y Rey del Mundo". Léanlo, no se van a arrepentir, gran libro, no se van a arrepentir. Lo escribe Marco Aurelio González Gama, directivo de este Portal.. Descanse en paz este gran escritor, quien murió en Guadalajara, a los 83 años de edad.