USTED INTERVENGA SEÑOR GOBERNADOR

No se cree que haya ciudadanos que estén en contra de la práctica de revisiones semanales como esa de los alcoholímetros, es indudable que detener a gente que conduce un vehículo en estado de ebriedad ayuda a evitar muertes como las que le han ocurrido a muchos jovencitos inexpertos.

Lo que sí molesta y hasta atemoriza hoy en día a la ciudadanía en tiempos de tantas noticias delanetadoras, es el exceso de autoridad de quienes carentes de toda sensibilidad lo practican.

A este reportero le tocó la experiencia el pasado viernes alrededor de las once de la noche y afortunadamente no como le pasaba a Gabino Barrera. Le platico al lector:

Esta noche, después de cenar con la familia regresaba a casa en mi coche por la calle de Maestros Veracruzanos.

Estaba el operativo antialcoholímetro.

Al pasar por el retén me pusieron el aparatito que mide el chupe. Me pidieron orillarme a la orilla, estacionarme y pasar a una carpa pegada a una ambulancia.

Uno de los dos doctores que había en turno me explicó que me volverían a poner en la boca el dichoso aparatito parecido a un silbato.

Me dijo que soplaría como siete segundos y que en esa especie de grabadora de periodista aparecería el registro de la cantidad de chupe que traía entre pecho y espalda, que si era de 40, me multarían y les tendría que dejar el coche.

¿Y qué cree? saqué 26 de calificación. me faltaron 14 caray.

Pero resulta que al decidir salir a cenar; estaba en mi casa en piyama, me cambié y dejé el saco donde traía la cartera con mis tarjetas y mi licencia y pa acabarla de amolar, la tarjeta de circulación también la había sacado del coche para ver cuándo tocaba el chequeo de la agencia.

Debido a esa carencia me dijeron que el coche sería retenido y tendría que pagar una multa de no sé cuántos días de salario mínimo y ya en palabras cristianas la responsable del operativo me dijo que serían como 64 pesos por día. Pensé, mañana recupero mi coche.

Y oh sorpresa, tenía que ser hasta el lunes porque los sábados no hay servicio de Hacienda del estado.

Tuvimos que caminar varias cuadras para encontrar un taxi.

De hecho el personal que hace la revisión es muy atento y respetuoso, pero los policías se tapan la cara y son demasiados para estipo de operativos; no hubo siquiera la atención y la sensibilidad del personal responsable de esa dependencia de gobierno, para decirme ve a tu casa por los documentos y entonces te devolvemos el auto.

Bendita memoria de tener sesenta y dos años de edad.

De todas maneras, no se vale que si no anda uno manejando “teterete”, le quiten el auto todo el fin de semana.

Ojalá joven gobernador ordene usted a su secretario del área a revisar actuaciones y al de Finanzas que abra una oficina para cobrar las infracciones, tan se puede que cuando Montano y Martínez Zaleta tuvieron esa tarea se colocó una oficina de Hacienda del Estado.

Se ganaría muchas simpatías y se quitaría tanto rumor negativo delseupuesto negocio de las grúas.

Ojalá se entere de esto el joven Duarte.

ENTREGA TOTAL

La Contraloría General del Estado anunció la semana pasada una rotación total de contralores en las dependencias estatales y que próximamente incorporará a la Comisión del Agua del Estado de Veracruz (CAEV) y a otras seis entidades del gobierno, un contralor interno, ya que son dependencias que manejan recursos federales y deben estar verificadas cotidianamente para evitar observaciones de la Auditoría Superior de la Federación o de la Secretaría de la Función Pública.

Ricardo García Guzmán es un funcionario responsable que ha demostrado con creces a lo largo de su trayectoria, que es honesto y que sabe hacer bien las cosas.

Que sea para el lector el de esta ocasión, un fin de semana saludable y de bienestar.

gustavocadenamathey@nullhotmail.com