No, no voy a hablar mal de los Juegos Centroamericanos, no vivo obsesionado con ello. De hecho la ceremonia de inauguración me gustó, y mucho. Me parece que en el espectáculo presentado hubo un buen equilibrio entre la modernidad y la cultura que nos determina. Ese sincretismo es un vivo reflejo de nuestra época, del Veracruz que fuimos y del Veracruz que queremos ser. Por gusto personal hubiera cambiado algunas cosas: ese tocado de la jarocha se me hizo exagerado; yo hubiera puesto a los danzoneros a bailar en el nivel superior del escenario y a los de danza contemporánea en el más bajo; Los Cojolites debieron ceñirse a la tradicional Bamba y no buscarle un ritmo que distorsiona la melodía. Cosas como esas hubiera cambiado, pero nada más. Hubo otras cosas que me fascinaron, las luces saliendo del vuelo de los voladores de Papantla y los fuegos pirotécnicos por ejemplo.
Al final la niña que pide paz me pareció nos entregaba un mensaje doble, por un lado señaló nuestra vocación pacífica, pero al mismo tiempo me pareció lanzaba un clamor urgente. En todo caso fue un mensaje pertinente: En un país lleno de violencia, impunidad y muerte, los veracruzanos clamamos paz.
Por supuesto, lo que más me gustó fue la rechifla que el público brindó al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. Rechifla extensiva al presidente Peña Nieto, pues apenas Osorio Chong pronunció su nombre, los veracruzanos, como muchos de los mexicanos que están hartos de la ingobernabilidad en este país, le recordaron a la más anciana de su casa, de su casa blanca por supuesto.
El caso es que ese viernes 14 de noviembre viajé a Veracruz, acompañando a mi amigo Melitón Morales, director de la revista Análisis Político. Nuestra salida fue al mediodía, pues quisimos saludar de paso a don Alfonso Salces, director del periódico Notiver. Nada más ver la manera de manejar de Melitón Morales, deseé mejor viajar en autobús.
Como siempre don Alfonso ya nos esperaba con unos cocteles “vuelve a la vida”, que son los más sabrosos que he probado en el mundo. Cuando los viejos amigos se saludaron me dio tanto gusto ver como dos personas, que tenían 14 años de no verse, se reencontraban. Resulta que cuando don Alfonso trabajaba en el Café Parroquia, Melitón ya editaba El correo de la noche. Estuvimos más de una hora platicando de esos tiempos que se fueron. Para mí, después de esa reunión, el viaje estaba completo. Pero teníamos una cita para acudir al hotel Camino Real donde nos iban a dar los boletos para entrar a la ceremonia de inauguración de los JCC Veracruz 2014.
Ya en el lugar de la cita nos enteramos que algún vivillo de gobierno dio boletos de más, por lo que dejó a buena parte de la prensa sin boletos. Había demasiados “invitados especiales”; muchos amigos de funcionarios que acudieron con sus familias enteras.
Coordinando a esos “invitados especiales” estaban Marlon Ramírez, el aprendiz de brujo y Juan Manuel del Castillo que, según dicen las buenas lenguas, ya no resuelve nada. Tantas invitaciones especiales otorgaron a los “hidalgos” (hijos de algo), que dejaron a varios periodistas, incluyendo a su servidor, sin boleto de entrada. A ese funcionario le valió madre que la prensa se quedara afuera.
De antemano, en la semana habíamos hecho el trámite de confirmar nuestra asistencia contestando un correo electrónico que nos había llegado pertinentemente. Imprimimos el folio que nos dieron y que sería canjeable por boletos para la entrada. Pero cuál no sería nuestra sorpresa al enterarnos que para nosotros no habría boletos. Al final, y gracias a las gestiones de Sergio González Levet, se decidió que nos llevarían a los “sin boleto”, en un autobús para entrar con el mero folio.
Antes de subir al autobús le pregunté a un sujeto con gafete, que parecía organizador, en qué área íbamos a estar. Me dijo que no sabía, pero que ya vería donde nos acomodaba; la verdad me sentí chivo, pollo, calabaza.
Le comenté la situación a mi amigo Melitón Morales y sabiamente decidimos regresar a Xalapa, para que, desde la comodidad del hogar, cada uno pudiera ver la ceremonia por televisión. Ya en casa me acordé que mi amiga la Nena Durán me regaló un ron Zacapa por mi cumpleaños. Fue así que decidí tomarme unas copas y ver la ceremonia en la sala de mi casa.
La verdad me gustó el ron, me gustó la ceremonia, pero más me gustó la rechifla a Peña Nieto.
Por supuesto, no tengo nada que reprochar a quienes me invitaron, esa tarde en Veracruz había quedado complacido de platicar con mi amigo don Alfonso Salces, quien siempre se ha mostrado como un hombre inteligente, lúcido, confiable y generoso. Digo, ¿quién necesitaba ver a Ricky Martin en vivo?

POSTDATA 1: BOLETOS PARA LOS JCC, COMO DESPENSAS EN CAMPAÑA ELECTORAL
Como se pueden dar cuenta quienes nos gobiernan, los que pueden echar a perder los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014 son las propias alimañas del gobierno que pasándose de vivillos andan regando el tepache. Por ahí se supo que un secretario de despacho regaló a diestra y siniestra boletos para la ceremonia inaugural. Dado que es un funcionario que en diciembre dejará el puesto para buscar una diputación, los boletos los regaló como si fueran despensas en campaña electoral.

POSTDATA 2: VERACRUZANO EJEMPLAR SERÁ ACREEDOR A LA MEDALLA ADOLFO RUIZ CORTINES 2014
A partir de la publicación de la convocatoria para la entrega de la Medalla Adolfo Ruiz Cortines 2014, la Comisión Especial recibirá hasta el próximo 25 de noviembre las propuestas de aspirantes a este reconocimiento, que año con año entrega el Congreso local. De acuerdo con la Presidenta de esta comisión especial, integrada también por los dipuatados María del Carmen Pontón Villa, secretaria, y los vocales Juan Cruz Elvira, Miguel Ángel Sedas Castro y Jesús Alberto Velázquez Flores, la convocatoria ya se signó y remitió a la Secretaría General del Congreso, para que, conforme al procedimiento, se publique en próximos días en los periódicos de mayor circulación para informar a la sociedad.

CÍRCULO ROJO: INFORME O PROMESAS DE CAMPAÑA
A ver, a ver señor gobernador, el sábado por la mañana estaba informando o haciendo promesas de campaña. ¿Por qué entonces hablar de la ampliación del puerto de Veracruz?, ¿por qué hablar de la ampliación del puerto de Coatzacoalcos?; ¿son obras o son planes? Y luego eso de que “el Banco Mundial invertirá… ¡En qué quedamos!

Armando Ortiz