Se le llama crisis de los 40 o crisis de la mediana edad a esa etapa a la que llega una persona sintiendo que ha terminado su época de juventud y empieza la época de la madurez. Algunos entran en crisis, pues en esta edad les suceden cambios significativos. Las enfermedades llegan con más frecuencia, los padres mueren, el atractivo físico, si es que alguna vez se tuvo, decae; es decir, cuando más necesita uno del cuerpo, éste más se niega.
Pero ese momento de transición trae consigo también la consciencia de una edad llena de experiencias, de derrotas de las que se aprendió una lección y de triunfos que llenan la vida de satisfacción.
Pues Notiver ha llegado a los 40 años y ha sabido sortear las grandes crisis con entereza e inteligencia. Notiver ha sabido resistir las tremendas vicisitudes a las que se ha enfrentado, las tragedias que le han acometido. De modo que si con los cuarenta, Notiver afronta nuevas crisis, sabemos que otra vez saldrá adelante. Los intentos por echar abajo el proyecto de Notiver no han conseguido más que consolidar a un medio que pertenece a sus lectores, no a sus anunciantes y mucho menos a un gobierno que con la publicidad que contrata, pone a sus pies los servicios informativos del medio contratado.
Cuarenta años de Notiver no son poca cosa. Quizá no sea el decano de la prensa nacional, ni de la prensa veracruzana, pero Notiver es el decano de la prensa valiente, de la prensa que no se arredra ante las dificultades, de la prensa que saca la casta en los momentos difíciles.
Así fue en esta década que atravesó Notiver. Donde varios de sus trabajadores, de sus reporteros y gente de la edición fueron amenazados, amedrentados y algunos de ellos asesinados. Pero Notiver, a pesar del dolor se mantuvo de pie. En este pantanal que es la prensa en Veracruz, Notiver levanta el vuelo, y como el ave de Díaz Mirón, contempla su plumaje incólume.
Pero no hablemos de Notiver como si nos refiriéramos a un ente abstracto. Sí, Notiver es su director Alfonso Salces, pero Notiver es también sus trabajadores, reporteros, fotógrafos, caricaturistas, editorialistas, articulistas; los obreros de la imprenta, de los talleres, los que cuidan la entrada, las secretarias que contestan los teléfonos, los voceadores que venden el periódico; pero sobre todos ellos, Notiver es sus lectores, los que han mantenido a este medio como el único medio en Veracruz que sobrevive de su venta.
Vaya pues una felicitación a todos los que han hecho de Notiver un periódico congruente, que da espacio a la noticia de los acontecimientos de manera puntual; que da espacio al análisis y también al verso que hace de la noticia un bocado más digerible.
¡Que viva Notiver otros cuarenta años, aunque tenga que pasar por otras crisis!

Armando Ortiz aortiz52@nullhotmail.com