Muy mala noticia para mañana de domingo, el enterarnos de que el narco consentido del PAN ahora se ha convertido en el narco consentido del PRI. No creo que haya un solo mexicano que piense que la fuga del sr. Guzmán se realizó sin el consentimiento y aprobación del gobierno federal.
Con el mal humor que genera la noticia y al desfachatez que conlleva, comienza la mañana con comentarios con los amigos. Uno de ellos, activista de Movimiento Ciudadano comienza intentando aprovechar la situación para llevar agua al molino de dicho partido político, y afirma después de mi comentario ^El narco preferido del PRI y del PAN^, una frase escueta: ^y sus aliados^. En referencia al partido verde ecologista. Pero con la jiribilla que me caracteriza le contesté: ^No sé si Dante que ha sido un gran aliado (del sistema), haya tenido algo que ver^. Insinuando que no se vale acusar a los aliados del PRI y del PAN de la fuga del Chapo, pero recordando que todos los partidos políticos cumplen con su rol en los juegos de poder.
Esta reflexión me llevó a comentarle a mi amigo que en mi opinión, cuando Dante estuvo en la cárcel por venganza de Zedillo (recordemos que jamás le fueron probados los cargos de los que estuvo acusado), Dante no dijo una sola palabra de lo que él conocía del sistema político mexicano. Es decir, ^aguantó vara y guardó silencio^. Eso, es lo más valioso para los que detentan el poder en el país, así que fue recompensado con el registro de su partido político. Y a lo largo de la historia de Convergencia, hoy Movimiento Ciudadano, se vio lo útil que era para quienes mueven las piezas del tablero de ajedrez que es México. Así logró en el 2006 como premio ganar como Senador junto con Arturo Hérviz, y hoy, en 2015 obtiene premios jugosos en el estado de Jalisco, también como premio a sus servicios al sistema, y previendo que la fragmentación de partidos implica que los afines y leales obtengan una mejor tajada del pastel del poder nacional. Como corolario mi amigo me comenta que para los mexicanos la vida es un juego de ajedrez o un laberinto sin salida, y la conclusión es que tiene toda la razón, un juego de ajedrez para los pocos que mueven las piezas, y un laberinto sin salida para los muchos que estamos lejos de la toma de decisiones.
Platicando el asunto con otra amiga, comentábamos que en México de verdad estamos hundidos hasta las narices en la corrupción y la impunidad. Yo le decía que desde un síndico y un alcalde en adelante, todos los funcionarios públicos están para enriquecerse, pero eso es cultural, es lo normal –aunque no lo correcto- a ojos de los mexicanos. Al final de los comentarios, me dijo una de las mejores frases que he escuchado en mucho tiempo: ^En este país, los que creemos que esta mal robar, los que consideramos un cáncer la corrupción, los que pensamos que el mayor mal de México es la impunidad, SOMOS LOS RAROS^.
Esta frase fue la que me impactó, pues parece que a nadie le importa nada de lo que pasa. Muchos en las redes sociales somos ¨activistas de sillón¨, mostrando nuestra indignación en Facebook, en twitter, o en comentarios en whatsapp, y ya. Así, nada más. Consideramos que expresar nuestra opinión como si estuviéramos en un enorme centro de reunión, tomando el café con nuestros cincuenta amigos, es suficiente, y ya cumplimos con nuestras obligaciones para con Dios y la Patria.
Tienes razón Lola, nosotros somos los raros. Somos raros porque si vemos un accidente, y nos bajamos a ayudar, no estamos pensando en lo que podemos robar a los accidentados. Vemos la oportunidad de robarnos algo de una tienda y no lo hacemos. Consideramos incorrecto el desvío y mal uso de los recursos públicos. No le hacemos la barba al poderoso, nos da lo mismo si es rico o pobre, lo valoramos por su calidad como persona. Nos indignan los abusos del poder, tanto del poder político, del poder religioso, del poder económico, del poder social, del poder de los medios, del poder militar, del poder policial, del poder del crimen organizado, etc. Creemos que México tiene remedio y puede mejorar, si cada uno de nosotros cumple con su parte. Nos preocupa el medio ambiente y el cambio climático. Pensamos con empatía en los derechos de los demás. Procuramos respetar las reglas de convivencia, pero eso nos genera conflictos, pues amamos la verdad por encima de los convencionalismos sociales o la hipocresía. Por eso tenemos pocos amigos y muchos conocidos. Nos indigna la pobreza, y la desigualdad social. En fin, no quiero seguir enlistando lo que nos diferencia de la mayoría, de la norma, de lo común en México. Definitivamente en este país, los que queremos hacer las cosas correctamente somos los raros. La mayoría considera que lo malo es lo correcto, y los valores son para fingirlos no para vivirlos.
Por último resultó que el amigo de Movimiento Ciudadano me pregunta que opino sobre las posibilidades que pueda tener Héctor Yunes Landa como candidato a gobernador por dicho partido político. Le comento que de entrada, si tuviera que escoger en Movimiento Ciudadano, prefiero a Dante que a Héctor si supiera que ese partido esta destinado a ganar la elección.
Pero el comentario me llama mucho la atención. Porque es un comentario que corre en Movimiento Ciudadano. Héctor Yunes esta en pláticas con ellos. Es decir, nadie tiene línea todavía por parte del PRI. Y todos los protagonistas de esta historia están moviendo sus cartas. A sabiendas que al final, habrá línea o dinero suficiente para comparar voluntades, y ganará quien tenga que ganar.
Lo mismo está sucediendo con el PRD, que ahora amaga con que podría aliarse con el PAN para la minielección de la minigubernatura. Obvio que se realizan estos amagos hasta que ^alguien^ les llegue al precio, y definan con quien se unen. Considerando que las próximas elecciones las puede ganar un candidato con menos del 30% de los votos efectivos totales, gracias al milagro de la multiplicación de partidos y la consiguiente pulverización de los votos.
Los operadores de Pepe Yunes también juran y perjuran que su candidato trae la línea. Pero igual, a nadie convencen. Cuando menos el equipo de Erick Lagos es más discreto, no tratan de convencer a nadie, simplemente realizan su trabajo y si las cosas salen bien, que bueno y si no, pues no.
La realidad es que para quien esto escribe, sólo hay un candidato que ya tiene segura la opción para él o para su hijo y es por el PAN y se llama Miguel Ángel Yunes Linares. Claro que también tiene mucha manga ancha de operación, pues ser el coordinador de los diputados panistas en San Lázaro le da acceso al primer círculo de poder. Y una vez allí, tendrá que decidir y quizá hasta pactar, si va por la de 2016 o por la de 2018, dependiendo de lo que suceda y se defina en los primeros cuatro meses de su legislatura, que comienza el 1 de septiembre próximo. Dependiendo también de las circunstancias para la sucesión presidencial, pues no olvidemos que es muy cercano a Anaya, a Madero y a Moreno Valle.
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