Por Ramón Durón Ruiz

Hoy parafraseo una historia para usted: “Un ratón ve a un granjero y su esposa abriendo un paquete. Aterrorizado descubrió que era una ratonera, salió corriendo a la granja a advertir a todos:
— ¡¡Hay una ratonera en la casa!!… ¡Hay una ratonera en la casa! –gritaba.
La gallina, levantó la cabeza y sin darle importancia al asunto dijo: — Discúlpame ratón. Es un gran problema para ti, más a mí no me incomoda.
El ratón fue hasta el cordero y le dice: — ¡Hay una ratonera en la casa! —No hay nada que yo pueda hacer, solamente pedir por usted. Quédese tranquilo que será recordado en mis oraciones.
El ratón se dirigió entonces a la vaca, y ella le dijo: — ¿Pero acaso, es mi vida la que corre peligro? ¿Verdad que no?, así que no me molestes y vete.
Entonces el ratón volvió a la casa triste, por ser el único preocupado por la ratonera. Esa noche se oyó el ruido de una ratonera atrapando a su víctima. La mujer del granjero en la oscuridad, no vio que la ratonera atrapó la cola de una víbora venenosa. La víbora mordió a la mujer. El granjero la llevó al hospital. Ella volvió con fiebre. Todo el mundo sabe que para alimentar a alguien con fiebre, lo mejor es un caldo de pollo. El granjero fue por la gallina para hacerle un caldo.
Como la enfermedad de la mujer continuaba, amigos, vecinos y parientes, fueron a visitarla. Para alimentarlos, el granjero mató al cordero. Por desgracia, la mujer no mejoró y acabó muriendo. Entonces el granjero vendió la vaca al matadero, para cubrir los gastos del funeral.”1
La moraleja es formidable, cuando veas un problema en tu vecino, no lo dejes solo, atiéndelo, porque aparentemente es de él, pero con el paso del tiempo… ¡también puede llegar a ti!
Tal es el caso de la inseguridad y la impunidad, que HOY a nadie es ajena y agravia a los ciudadanos de varias regiones del país, con extorsiones, asaltos, secuestros, cuotas, asesinatos, levantones, etc.
Por si eso fuese poco, se da la segunda inusual fuga del penal de alta seguridad del Altiplano, de Joaquín “El Chapo” Guzmán, que logró evadir los sistemas de seguridad, video vigilancia, monitoreo de más de 700 cámaras, asentando un severo golpe a las instituciones de seguridad. Recordemos que la primera fuga fue en 2001, en el penal de Puente Grande, Jalisco, en un carro de lavandería.
Anthony Giddens afirma: “Vivimos en un mundo desbocado, nos enfrentamos a problemas y conflictos para cuya soluciones no hay antecedentes, HOY más que nunca es el momento de redescubrir el derecho penal, de hacer una reingeniería que sugiere que el derecho ha dejado de hacer o producir aquello para lo que había sido fundado, implica si es necesario, volver a sus origines, comenzar de cero”.
HOY nuestras instituciones de seguridad y procuración de justicia, requieren hacer una reingeniería, que los lleve a recuperar la credibilidad y confianza ciudadana para darle un nuevo rostro institucional en donde nadie esté por encima del derecho.
Se hace necesario romper el círculo vicioso de la impunidad delincuencial; imponer castigo a viejos y nuevos rostros delicuenciales y pasar al círculo virtuoso del cumplimiento con la ley y el estado de derecho, sabiendo que las funciones de las instituciones de seguridad son neurálgicas para la viabilidad del estado.
HOY, más que nunca se hace necesario cuidar que las instituciones de seguridad no se vean desbordadas, tal parece que en éste tema el Estado mexicano va atrás de la delincuencia, mientras ésta marcha a pasos agigantados; las instituciones de seguridad reaccionan lento y a posteriori, “si hay problema en Cd Juárez, hacia allá van las instituciones de seguridad; si hay problemas en Michoacán, hacia allá van; si hay problemas en el penal de Almoloya de Juárez, allá están… ¡sólo que un paso atrás!”
HOY, se hace necesario replantear las instituciones de seguridad, haciendo una reestructuración y reorganización que renueve las bases de su quehacer; que ataque frontalmente la impunidad, la arbitrariedad, la discrecionalidad, fortaleciendo el estado de derecho, y trabajando para que impere lo jurídico sobre lo político .
El Filósofo de Güémez afirma: “En México la justicia es como la rubéola… ¡sólo le pega a los chiquitos!”
1http://rieysonrie.com/reflexiones/eldondesaberescuchar.html
filosofo2006@nullprodigy.net.mx