Con el inicio del nuevo ciclo escolar en los diversos niveles educativos se renuevan las esperanzas para nuestra juventud e infancia de lograr los objetivos establecidos. Las madres y padres hacen lo propio porque ven en la educación la puerta de acceso a la movilidad social.
Las exigencias de nuestra época requiere una sociedad más preparada académicamente, que sepa utilizar las herramientas que la tecnología nos otorga, sin olvidar la esencia de nuestra educación: la transmisión de valores humanos, el conocimiento de nuestra lengua madre y un pensamiento lógico-matemático.
La educación pública es un derecho que no debemos perder, porque significa la esperanza para millones de personas en nuestro estado y en el país. En una sociedad donde la mayoría de su población está catalogada como “pobre”, la escuela pública será para ellos y ellas su única vía de acceso al conocimiento.
Eso lo saben los representantes populares que han recorrido sus respectivos distritos para entregar apoyos en útiles escolares a nuestros estudiantes de educación básica.
En Veracruz tenemos un millón 639 mil 369 alumnos de preescolar, primaria y secundaria que son atendidos en 20 mil escuelas a lo largo y ancho del territorio. Es posible que para muchos de ellos y ellas sus libros de textos sean los únicos a los que tengan acceso, y el apoyo material que les otorgan sus legisladores sea quizá fundamental para enfrentar exitosamente el ciclo escolar.
El presidente de la Comisión Permanente de Educación en el Congreso veracruzano, Ernesto Hernández Hernández; invitó a estudiantes y docentes a dar su mejor esfuerzo para obtener los resultados que la sociedad espera de ellos. Al magisterio local le pidió prepararse para las evaluaciones que en breve presentarán como parte del diagnóstico que se realiza en el país.
“Es muy importante que todos se evalúen. Si no aprueban, tendrán la oportunidad de capacitarse y presentar el examen nuevamente, pero los resultados nacionales demuestran que los maestros veracruzanos están muy bien preparados.”
Y es que el asunto de la educación es una prioridad para nuestro estado. De acuerdo con los datos del Consejo Nacional de la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) del año pasado, el 58 por ciento de la población en nuestra entidad está en estado de pobreza. Esto representa un aproximado de cuatro millones 634 mil habitantes.
Por esto necesitamos el compromiso de docentes y sociedad, para poder facilitarle a nuestra niñez y juventud las herramientas necesarias que les permitan labrar un futuro mejor con relación a su presente.
Debemos comprender la magnitud del problema social que tenemos y que puede agravarse. En este momento lo importante es trabajar en forma conjunta porque el futuro nos puede alcanzar. Ningún gobierno, ninguna sociedad, puede pensar en un desarrollo a futuro con estos niveles de pobreza y sus consecuencias sociales que conlleva.
Lamento que un edil del sur de la entidad haya priorizado sus intereses privados a los de su población al impedir la entrega de útiles escolares a niñas y niños de escasos recursos. Pero bueno, cada quién con su conciencia. Nada qué agregar.
Por hoy es todo; les deseo un excelente día y nos leemos en la próxima entrega.