Ante los reiterados reclamos de veracruzanos por el pésimo servicio que reciben del Seguro Popular, Política al Día decidió investigar el caso y conocer de viva voz de los usuarios su percepción del servicio.
En ese tenor, www.politicaaldia.com se apoyó en un trabajo colaborativo con el “Grupo Consultor Santoyo y Asociados” que realizó una Encuesta de Satisfacción con el fin de corroborar el gran reclamo popular que existe entre los beneficiarios de la capital veracruzana.
Así, del 12 al 15 de septiembre pasados, encuestadores del “Grupo Consultor Santoyo y Asociados” se apersonaron en los Centros de Salud de Xalapa, donde se otorga el servicio y aplicó un muestreo con una metodología aleatoria simple, cara a cara con los asegurados. De acuerdo con esta metodología, el Ing. Luis Santoyo Domínguez, responsable técnico del estudio, afirma que el margen de precisión y nivel de confianza es del 90%.
El Seguro Popular, de acuerdo con la normatividad y las Reglas de Operación, está dirigido a personas que no cuentan con empleo o que trabajan por cuenta propia y que no son derechohabientes de alguna otra institución de seguridad social, con el fin de cubrir la totalidad de mexicanos como lo mandata el artículo 4° Constitucional, en el que se establece que la salud es un derecho y, por ende una obligación del Ejecutivo: “Toda persona tiene derecho a la protección de la salud”. De acuerdo con esa obligación del Ejecutivo Federal, el Congreso de la Unión destinó 75 mil 227.7 mdp en el 2014 y 77 mil 871.3 mdp en el 2015 para cumplir con los siguientes objetivos:
1. Reducir riesgo de empobrecimiento a familias vulnerables.
2. Fomentar la atención oportuna de la salud.
3. Fortalecer el sistema público de salud, superando la brecha entre derechohabientes de la seguridad social y los que no lo son.
4. Contribuir a superar iniquidades y rezagos en la distribución del gasto entre entidades federativas.
Según los datos oficiales, el Seguro Popular es una maravilla, ya que de acuerdo con el Comisionado Nacional de Protección Social en Salud, Gabriel O Shea Cuevas, las personas afiliadas tienen acceso a servicios médico-quirúrgicos, farmacéuticos y hospitalarios para satisfacer de manera integral sus necesidades de salud y ofrece una cobertura médica en 285 intervenciones y más de mil 500 enfermedades.
Sin embargo, de acuerdo con los resultados de la encuesta del Grupo Consultor Santoyo y que www.politicaaldia.com analizó, los asegurados en Xalapa, perciben algo muy diferente:
• El 39% de los usuarios provienen de otras partes del Estado. Los entrevistados aseguraron no ser atendidos en su lugar de residencia por falta de personal médico, las clínicas estaban cerradas o no cuentan con medicamentos de ningún tipo.
• El Estado de Veracruz cuenta con 52 centros de atención para personas del Seguro Popular, la mayoría en precarias condiciones de recursos.
• El 22.7% solo acude una sola ocasión a recibir la atención médica en esos centros, pues una vez que sufren del mal servicio prefieren acudir a los servicios particulares del Doctor Simi, que operan en casi todas poblaciones del Estado. Solo el 13.2% acude más de 10 veces al año a recibir el servicio, por tratarse de personas que necesitan chequeo médico, o recetas médicas para adquirir antibióticos en farmacias particulares.
• En cuanto al motivo por el que utilizan el Seguro Popular, el 38% contestó que para consulta, 24% para operación, 17% por tratamiento de padecimiento crónico, 12% para análisis y diagnóstico y el 9% por accidentes y lesiones.
• Del total de entrevistados a solo el 22% le son proporcionados los medicamentos recetados. Al 26% no se les surtió, por falta de medicamentos en el Centro de Salud y al 52% solo les proporcionan medicamentos de poco valor económico como paracetamol y analgésicos. Por cierto ese 22% está muy lejos del 80% que asegura tiene el Seguro Popular como promedio en el país, según declaró apenas el pasado 15 de septiembre el Comisionado Nacional de Protección Social en Salud, Gabriel O Shea Cuevas…
Este gran problema de falta de medicamentos en el Seguro Popular persiste a pesar de que en el 2014 el Comisionado Nacional aseguró que con las Reformas a la Ley General de Salud, que facultó a la SHYCP para retener el 30% del dinero del esquema destinado a la compra de medicinas y pagar de manera directa la adquisición que realicen las entidades federativas, no hay riego de que se desvíe a otros fines.
Además, O Shea Cuevas aseguró, también en el 2014, que el dinero que se le transfiere a las entidades por conducto de las secretarías de Finanzas, debe llegar a los servicios de salud en los primeros cinco días hábiles de cada mes y reportarlo a la Federación de inmediato. El incumplimiento de esta disposición obliga al pago de multa y de intereses por los días de retraso.
Cabe destacar que de los entrevistados el 61% dijo que los centros cuentan con el equipo médico necesario, aunque si bien es cierto, hacen el señalamiento al equipo que se utiliza para medir la presión y auscultación de pulmones y estómago. Mientras que el 12% dijo que los centros no cuentan ni siquiera con esos equipos y el 8% dijo que “solo algunos”.
Con respecto a su nivel de satisfacción, el 39% de los entrevistados dijo que el Seguro Popular les ha servido de mucho. En cambio el 51% contestó que les ha servido poco y 10% contestó que “en nada” o que cuando menos en algunas ocasiones sólo les dieron la consulta… “de nada a algo”, dijeron algunos.
El 43% de los entrevistados opinaron que el Seguro Popular debe cumplir con el abasto de medicamentos. El 6% que se debe ampliar la cobertura de enfermedades. El 17% dijo que se debe mejorar la atención y la eficiencia. El 11% pidió que se utilicen médicos especialistas. El 8% que haya más y mejor equipo médico y el 7% pide que haya mayor cobertura de medicinas.
En este último punto, los entrevistados se quejaron de que en los Centros de Salud no se les da a conocer el cuadro básico de medicamentos ni qué tipos de enfermedades cubre el Seguro; solo se enteran cuando las enfermeras consultan su lista y les dicen “esto no lo cubre el seguro”…
En general, la gran mayoría de las personas que acuden a recibir este tipo de servicios son de escasos recursos económicos y sienten que son tratados como si fueran limosneros.
Los pocos médicos que quisieron dar su opinión a Política al Día dijeron que la cantidad de personas que deben atender es enorme y la capacidad de las clínicas no se ha incrementado. “De buenas a primeras nos aumentó la demanda del servicio, pero el espacio y los equipos son los mismos que antes”.
En conclusión, es claro que aunque el Poder Federal ve a este programa como algo maravilloso, en la realidad y en los hechos, el servicio deja mucho que desear, por lo que la pregunta es ¿Qué le hacen a los más de 70 mil millones de pesos que en promedio les han sido asignados en los últimos años?