Tras la emergencia que vivimos en el país por el paso del huracán “Patricia”, debemos sentirnos afortunados porque los daños no fueron los que se esperaban. Caprichos de la naturaleza, que hoy nos beneficiaron.
La semana pasada tuve la fortuna de asistir a la inauguración de la exposición “Escucha mi voz”, resultado del concurso internacional Violencia Intrafamiliar, convocado por la Fundación Juntos con las Niñas y los Niños AC (Juconi), y la Alianza por la Infancia y sus Familias (Aifam), en la que apreciamos 33 de los 50 carteles ganadores. El corte del listón estuvo a cargo de la diputada presidenta de la Mesa Directiva de la LXIII Legislatura local, Octavia Ortega Arteaga.
Este año, el concurso registró un aumento de 53 por ciento en el número de participantes, originarios de más de 20 países, entre los que destacan Turquía, Bolivia, Estados Unidos, Venezuela, Polonia, Ecuador y México.
La violencia en el interior de las familias es un tema que nos ocupa desde hace algunos lustros. Lo que antes era “normal”, ahora sabemos que no lo es. Los golpes, los gritos, las indiferencias, son sólo algunos de los aspectos que “vemos”, pero cuyo daño se registra a mediano y largo plazo.
Para 2010, la Secretaría de Salud colocaba a Veracruz como la tercera entidad con el mayor número de casos probables de violencia. Sólo debajo del Estado de México y Campeche. Desafortunadamente, las mujeres somos quienes más violencia sufrimos durante nuestra vida.
Ese mismo año, el Consejo Nacional de Población y Vivienda (Conapo) registró un total de 45 mil 57 casos de violencia intrafamiliar. De estos número, 40 mil 889 son mujeres y cinco mil 168 son varones. Aquí no desgloso los rangos de edad, pero abarca desde la infancia hasta la vejez.
Por eso debemos celebrar los esfuerzos encaminados a sensibilizar a la población para erradicar la violencia en el seno familiar. Porque al hacerlo estaremos abonando el camino para tener una sociedad más solidaria.
Resalto que el Congreso del Estado de Veracruz es el primero en el país donde se monta la exposición Escucha mi Voz, por lo que la directora de la Aifam, Gabriela Escobar Razo, habló sobre la importancia de que los diputados integren a su agenda de trabajo el diseño de políticas públicas que contribuyan a elevar la calidad de vida de las familias: “Si verdaderamente queremos construir ciudadanía, tenemos que poner los ojos en la infancia”.
Considero que ya se debe dejar ese discurso añejo de que “los niños son el futuro”. No. Las y los niños no son el futuro, sino el presente al que debemos abocarnos, si es que queremos permanecer como especie civilizada. El arte ayuda, pero tenemos que actuar.
Por su parte, el presidente de la Comisión Permanente de Desarrollo Social, Humano y Regional del Congreso del Estado, Jesús Alberto Velázquez Flores (presente en la inauguración), explicó que los derechos infantiles están íntimamente relacionados con los de la mujer, pues la mayoría de las veces están inmersos en un ciclo de violencia que inicia en el hogar.
“La sociedad, y principalmente quienes tenemos la oportunidad de diseñar las políticas públicas y normas, debemos asegurar que se cumplan como obligación jurídica; imperativo moral y prioridad en materia de desarrollo”, dijo.
Por hoy es todo. Le deseo un excelente inicio de semana y nos leemos en la próxima entrega.