DENTRO de un panorama político, de alguna manera enrarecido por las circunstancias políticas que se han ido presentando en relación a la sucesión gubernamental, el Gobernador del Estado, Javier Duarte de Ochoa, estuvo en Acayucan, ahí donde se presentó la mayor votación en el pasado proceso electoral federal.
El titular del Poder Ejecutivo, hizo anuncios ante más de quince mil asistentes, procedentes de los diversos municipios de este distrito y otros más que acudieron al llamado político. Hubo, sin duda alguna, baño de pueblo, a unos cuantos días de que acuda ante el Congreso local, para entregar el quinto informe de gobierno.
Los anuncios, algunos de ellos, a cumplirse hasta el seis de enero del próximo año, cuando se lleve a cabo, una vez más, el aniversario de la expedición de la primera ley agraria, no fueron, en realidad, el tema central de este encuentro con los diversos sectores de aquella región. Hubo, al parecer, otros intentos, es decir, demostrar que las próximas elecciones, las ganará el PRI, y de paso, mostrar a uno de los duartistas que tiene fama de sumar votos.
¿Será que Duarte, prepara uno más de sus cercanos ex colaboradores para lanzarlo, en el caso necesario, a disputar la gubernatura de dos años?.
Todo puede suceder, pues la política, aunque se diga constantemente que depende en gran parte de las circunstancias, también es justo mencionar que las estrategias juegan un papel importante dentro de este proceso electoral, donde, al parecer, se quiere jugar con todo y con todos, pues si un delfín no da resultados al momento de la definición, debe haber otros que se encuentren en las mismas condiciones para no dejar el campo solo.
Así, por lo menos, ya son dos los hombres del Gobernador.
Uno, ya esta en el PRI, ya hace el trabajo político que le corresponde de acuerdo a los planes oficiales, mientras que el otro, se aproxima por el otro flanco de la batalla central.
Y es que, a estas alturas del proceso interno del Partido Revolucionario Institucional, comienzan las apuraciones entre quienes no tienen la tarea resuelta. Se les acaba el tiempo y como todo mundo sabe, una elección no es la misma siempre, el PRI, lo ha experimentado en muchas ocasiones, pues donde ha ganado, en otras ocasiones ha perdido, lo que significa que el electorado, para cada caso, tiene a su propio candidato.
En fin, que la concentración de Acayucan, en su mayoría de la gente del campo, nuevamente volvió a surtir efectos, es decir, que hubo respuesta, sobre todo, ante el Gobernador del Estado, quien hace su propio trabajo, muy aparte de lo que, desde la ciudad de México, pueda venir.
Mientras tanto, la Convocatoria priista, para dar inicio al proceso interno de selección de candidato a la gubernatura del Estado, ya esta lista para ser publicada a más tardar el nueve de enero, apenas pasados unos cuantos días de la realización del acto agrario, que al parecer, se llevará a cabo en la ciudad de Veracruz.
La concentración campesina, le dará calor a este acontecimiento, por lo que ahora, sí será viable que alguna señal pueda colarse con referencia al futuro candidato tricolor, pues el pasado veinticuatro de octubre, el dirigente nacional, Manlio Fabio Beltrones, se fue por la tangente, no dijo nada, aun cuando los asistentes esperaban, cuando menos, un discurso político más apegado a las circunstancias políticas que se han estado viviendo en torno a la sucesión gubernamental.
Pero, eso sí, pidió unidad, la palabra que muchos consideraron como un especial mensaje político a los veracruzanos…
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Y AL FAMOSO cisne, no le quedó de otra. Tuvo que pedir disculpas.
Efectivamente, como ya se dio a conocer este fin de semana, el dirigente estatal del PRI, se vio obligado, humildemente, a pedir a todas las mujeres, su comprensión, pues asegura que una mala interpretación, fue la causa de este problema suscitado a raíz de sus declaraciones del pasado martes tres, cuando se enredó el asunto y declaró que posiblemente se les pidiera un examen de gravidez, a quienes quisieran participar en las próximas elecciones del mes de junio.
Sus palabras, fueron una bomba en explosión, pues de inmediato, la noticia circuló por todo el territorio nacional, con especial repercusión en la ciudad de México, desde donde vino la reacción y la sugerencia para el líder priista de que pidiera disculpas.
Ni tardo ni perezoso, así lo hizo.
El viernes pasado, se convocó a una conferencia de prensa, en las mismas instalaciones del Partido Revolucionario Institucional, donde, antes de entrar a otros temas, Silva Ramos, comenzó por disculparse por este desatino.
No se sabe, todavía, si las mujeres quedaron convencidas por este arrepentimiento del famoso Cisne, pero lo que si fue cierto es que la presión política, que vino desde el altiplano, ya también se había definido aquí, donde la instrucción fue precisa en el sentido de darle la vuelta a la hoja y no crear mayor polémica, pues no son los momentos para ponerse en un plan de esta naturaleza.
Aceptar el error y pedir disculpas, es lo menos que se podía hacer.
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Y LO QUE, supuestamente, se llevaba preparado, como un tirititito en contra de la oposición, que consistía en llevar pan de muerto a la conferencia de prensa, donde se pretendía resaltar que el PAN, el Partido de Acción Nacional, estaba como el pan que se había llevado a la mesa de los reporteros, es decir, prácticamente muerto, relacionándolo con la futura elección constitucional, y aprovechando, todavía, las festividades de Todos los Santos, se volvió, para el dirigente del PRI, Alberto Silva Ramos, en un verdadero tiro, pero por la culata.
En medio de tantas declaraciones, lo que más se destacó, como todos saben, fue la desafortunada declaración de Silva Ramos, de que se haría examen a los aspirantes a una posición de carácter electoral.
Ni las fotos que se tomaron al pan de muerto, tuvieron tanto éxito en las redes sociales, como lo que dijo el Cisne. Así se dio otro capítulo más dentro de esta importante etapa de la política veracruzana.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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