NO ES su culpa, cuando menos, no toda, de que los pensionados y jubilados, no hayan recibido a tiempo sus pensiones y demás prestaciones a que tienen derecho, pero Armando Adriano Fabre, Director General del Instituto de Pensiones del Estado, indudablemente que salió muy raspado.

Como el asunto del pago a pensionados y jubilados, aún no termina, pues se afirma que los derechohabientes del IPE, volverán a la carga entrando el mes de enero, podría estarse gestando uno de los últimos movimientos dentro de la administración pública estatal, con la finalidad de ganar tiempo o simplemente que sea otro, quizá más abusado, que le entre al toro.

De alguna manera, Adriano Fabre, se había mantenido quieto, hasta cierto punto tranquilo en su dependencia, hasta que los jubilados y pensionados, decidieron tomar el rumbo de las manifestaciones y exigir, con más dureza, el derecho que les asiste.

Así, no es nada extraño que el Director del IPE, renuncie apenas entrado el mes de enero y consecuentemente, el nuevo año.

Para el Gobernador del Estado, Javier Duarte de Ochoa, el próximo año será de gran trabajo, ocupación y preocupación por el proceso electoral que ya esta en puerta, por lo que no ha de querer que las manifestaciones se hagan nuevamente presentes en la Plaza Lerdo, en las propias oficinas del Pensiones del Estado, y menos en las entradas y salidas de la ciudad, taponeando las vías de comunicación.

Por eso, tendrá que tomar otras medidas. Recomponer el resultado de las negociaciones, donde Adriano Fabre, ya no estaría al frente.

Es cierto, que dejar al IPE, por unos días, sin Director, no ayuda a nada, porque el problema seguiría igual, siempre y cuando no se le hagan llegar los recursos necesarios para que la institución cumpla, al pie de la letra, con sus obligaciones correspondientes.

Pero, sin duda, alguien tiene que pagar el pato. Así lo reconocen los mismos funcionarios del IPE, aún sabiendo que Adriano Fabre, no tiene la culpa, pero que tampoco puede echársela a otro y menos a quien dirige las Finanzas del Estado.

No será fácil, entonces, para el Director del IPE, ponerse a las patadas con Sansón.

Y esta, quizá, sea la razón por la cual, en este momentos, Adriano Fabre, podría estar sopesando, con tranquilidad, su separación del Instituto de Pensiones del Estado. De no hacerlo, sería aguantar y seguir bailando, como el gobernador del Estado, con la más fea.

No se duda, porque lo sabemos, que el Director del Instituto de Pensiones, es hombre honesto, que no sería por ahí la cosa, porque ha trabajando incansablemente para resolver los graves problemas que se le presentan, pero las presiones que ha tenido que enfrentar en los recientes días, lo han puesto en guardia, en estado de reflexión sobre el papel que ha estado jugando y que, de seguir al frente del IPE, los seguirá jugando, aunque tenga, sin duda, que prepararse, tanto en mantener buena su salud, como para seguir cumpliendo el reto de seguir en una dependencia que no es nada fácil de administrar, menos en estos tiempos de crisis económica y de palpables presiones políticas.

Armando Adriano Fabre, terminó el año en una tablita, la de su salvación, pero los fuertes vendavales, se lo podrían llevar si es que, en el mes de enero, como lo anuncian los pensionados y jubilados, las protestas vuelven al escenario político de Veracruz.

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EN MENOS DE UN mes, la candidatura del PRI, a la gubernatura del Estado, deberá quedar resuelta.

Sin embargo, habrá que ver, todavía, muchas cosas, al parecer, inéditas en un proceso interno de esta naturaleza.

El mismo dirigente nacional de esta organización política, Manlio Fabio Beltrones, no ha querido, ni quiere, entrarle a torear al toro. Espera, como se sabe, que los tiempos lleguen y que las instrucciones maduren.

El método de selección, que ya se ha aprobado por el Consejo Político Estatal, tiene un raro mensaje. Todos los saben, todos los han analizado y sudan frío cuando llegan a sus propias conclusiones.

Y es que, los Delegados, en este caso, se preparan para la Convención respectiva, donde saben que podría irles muy bien, pues nadie se deja y emplea las estrategias que considera pertinentes para este caso. El mismo Presidente del PRI nacional, lo sabe. Por eso, no quiere muy bien, entrarle a torear al toro.

Y es que, a pesar de las evidencias que existen por cuanto a las posibilidades de triunfo electoral del PRI, con un candidato débil, frente a otro que podría ser mucho más fuerte, se mantiene el empeño, tal vez, la necedad, de medir las fuerzas políticas dentro del mismo tricolor, donde, lo mejor que pudiera suceder, es hacer realidad el llamado de Beltrones, es decir, el llamado de la unidad.

Pero no, hay todavía la creencia de que un candidato débil podrá superar a cualquier otro, aún con una alianza que se ha estado ensayando desde hace tiempo en lado izquierdo y derecho del escenario político de la entidad, y que no se ha concretado, porque así son las estrategias políticas.

Pero, ya veremos que sucede, finalmente, en la tercera semana del mes de enero, como se ha calculado, resolver este dilema político.

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MIENTRAS SE resuelve el asunto de la candidatura priista a la gubernatura del Estado, no han faltado quienes alcen la mano de quienes están en la recta final, cuando menos, apuntados para alcanzarla.

Unos dicen que Pepe Yunes, y otros que Héctor. Los dos, como se ha comentado demasiado en los recientes meses, son merecedores de esta oportunidad política, la cual, es indudable que es importante para ambos en sus respectivas trayectorias políticas.

Son, eso sin duda, los más avanzados en esta carrera por la sucesión, pero no hay que cantar victoria, porque antes que nada, hay que analizar detenidamente las circunstancias políticas, aunque bien se sabe, que los proyectos que se han forjado a lo largo de estos meses, pertenecen a los dos y que, por lo tanto, alzar la mano a uno es apartarse de la dirección correcta, es faltar a la lealtad política que debe ser para los dos, hasta que el asunto se resuelva.

Si es Héctor el candidato priista a la gubernatura del Estado, es parte del proyecto político con Pepe. Sin es Pepe Yunes, lo mismo debe suceder para cumplirse los acuerdos ya establecidos entre ambos políticos veracruzanos, los dos forjados, eso sí, en el quehacer político de Veracruz, y del país.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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