«La necesidad e importancia de un gobierno eficaz es obvia y no debería ser motivo de mayor discusión. Sin embargo, luego de leer el fascinante libro «La Cuarta Revolución» de Miclethwait y Wooldrige, me parece evidente que éste no se logrará en tanto no se resuelvan asuntos fundamentales de lo que es, y la forma en que se conduce el estado mexicano. Mientras que algunos países experimentan lo que los autores llaman la «cuarta revolución» del Estado, en México ni siquiera hemos logrado concluir la segunda, la del estado liberal (la tercera es la del Estado de bienestar), esa que tuvo lugar al final del siglo XVIII y principios del XIX». Lo escribe Luis Rubio en «Reforma», quien agrega que buena parte de la falta de eficacia del gobierno mexicano «se deriva de la fundamentación del sistema de gobierno basado en el ánimo de controlarlo todo y preservar privilegios».