*Valiosa exposición histórica de la vida de los cosautecos…..y de Teocelo.

*Labor incansable del Obispo Rafael Guizar y Valencia en el terremoto de 1920.

*La vieja Remington, la plancha de la abuela y un jarrón de 1910…joyas valiosas.

“No hay cosa más triste que el silencio como regla sobre los pueblos”.

“Fue un sábado 3 de enero, sin caer un aguacero, pasó una fuerte corriente, y eso lo mandó el cordero, para quien era más fuerte….”. La parte de esta décima del maestro Joel Pineda Velatty, se escuchó mientras admirábamos la valiosa exposición que guarda la maestra Angeles Valdivia Ortiz, en una céntrica casita en el pintoresco Cosautlán.

Gráficas que narran y describen perfectamente la historia de este pueblo, en los años de 1896, escritos que guardan la limpia y correcta ortografía y presencia de la mano que recorre la hoja, con un manguillo, pluma de guajolote y tinta, programas que anuncian la feria y eventos de dicha época, testimonios que se niegan al olvido….la plancha de metal de la abuela que acomodaba en las brasas para planchar las almidonadas camisas del esposo…el viejo teléfono de la abuelita de la maestra Valdivia Ortiz, ese jarrón que no sufre el paso del tiempo y enseña el año en que fue elaborado, intacto para continuar guardando agua fresca…año de 1910.

Llama la atención la recordada máquina de escribir, negra como característica…¡Claro!, la vieja Remington, en su estuche y que tuvimos la oportunidad de teclearla, llegando a nuestra mente los primeros escritos en la sala de redacción en la Facultad de Periodismo de la Universidad Veracruzana, en la ciudad del mismo nombre…después en mi cargo de síndico único de Teocelo, en 1973 y que utilizaba para las diligencias como Agente del Ministerio Público Municipal…posteriormente la Remington en la oficina del semanario La Gazeta de Xalapa…añoranza y testimonio del viejo azadón del periodista.

Comenta la maestra Angeles Valdivia Ortiz: “Esta foto en donde aparece el obispo Rafael Guizar y Valencia, llevando alivio a las familias afectadas en el temblor de 1920. Me dicen que está en la comunidad de La Gloria, Cosautlán…pero lo que sí es un hecho, que fue en ese trágico año de 1920, temblor que no solamente sacudió a Cosautlán, acabó también con las calles y casas de Teocelo…incluso derribo la torre de la iglesia de la Asunción de María”.

Lo invitamos a que acuda al museo de Cosautlán, en el centro de este pueblo que ahora disfruta de sus fiestas tradicionales en honor a la Candelaria…y aprecie la mesa de madera de los años de 1900 y que se conserva, hueca para resguardar las monedas ante el acoso de los rebeldes, la antigua máquina de coser, como pocas…y muchos testimonios más que guarda la maestra Angeles Valdivia Ortiz…agregaríamos solamente la fotografía del mejor compositor de música, nativo de este lugar, de Aguatepa, Cosautlán, don Primitivo Muñoz.

Un día para la visita a la iglesia de la Candelaria y por la tarde, acudiendo al hogar de Raúl Galván Leal, a saborear la exquisita comida que preparó doña Oli, esposa del cafetero cosauteco, digamos de entrada el espagueti, el mole de guajolote, las carnitas y las mantequitas, los ricos chile rellenos y en frío…los chocos para acompañar el mole y desde luego el aperitivo al gusto…

Nos dimos cita, con Paulino Velasco y su amigo fotógrafo, el Capitán Carlos Jurado Perches y esposa, el presidente municipal de Banderilla, ingeniero Esteban Acosta Lagunes, la guapa Arely Bonilla, y la notable participación del maestro Joel Pineda Velatty, quien con sus décimas recetó a cada uno de nosotros, con sus atinados versos y cantos con su jarana…

Remato:

Está la feria sin un pero,

En Cosautlán, así se siente,

Invita el amigo cafetero

A la cabalgata el día siete.

morachama@nullgmail.com Cel: 2287 77 42 64