Felipe Amadeo Flores Espinosa es un político con talento y gran experiencia en el ejercicio de la función pública; se iniciò y se ha forjado en la talacha partidista.
Pese a su apariencia adusta y parco en el hablar, es, como se sabe, un político de la vieja guardia que se distingue, entre otras cosas, por no conflictuarse con personajes o grupos de poder; al contrario, siempre busca el equilibrio, el respeto y la armonía con sus pares.
Es disciplinado y sabe aplicar la màs elemental de las ecuaciònes matemáticas a la política: sumar, sumar, sumar y multiplicar y jamàs, para nada, dividir o restar. Es conciliador y privilegia el dialogo Ese ha sido el éxito que durante màs de 40 años le ha permitido al político originario de Cotaxtla su vigencia y permanencia en cargos de alto rango en el poder público y partidista.Su aparición en puestos públicos siempre ha sido en plan estelar, como ahora lo hace al llegar a la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional por segunda ocasión.
Sumado a esa prolongada carrera política-ha sido secretario de gobierno, líder de la cámara local de diputados, director de Seguridad Pùblica, diputado local y federal-, entre otros múltiples cargos, Amadeo Flores Espinosa cuenta con un plus del que pocos políticos pueden presumir :magnìfìcas relaciones con los medios de comunicación.
Por si eso fuera poco, es de los contados actores públicos que conoce los intestinos de la geografía política de la entidad, sus grupos de poder, sus organizaciones y lìderes sociales, por lo que es considerado como uno de los polìticos mejor informados y màs completos del Estado de Veracruz.
Su arribo a la dirigencia estatal priista, sin embargo se da en momentos sumamente complicados para el partido en el poder que es rechazado por su propia militancia y amplios sectores de la ciudadanía a causa de lo errático de las políticas pùblicas tanto federales y estatales.
Tarea titánica para Felipe Amadeo, ya que tendrá que echar mano de todos sus recursos y habilidades como estratega y operador político que es, para sacar adelante el triunfo de Hèctor Yunes Landa como gobernador el próximo 5 de junio en una de las elecciones màs reñidas de la historia política de la entidad.
Pues no debe soslayarse el malestar existente entre los jóvenes, universitarios, estudiantes, pensionados, maestros, empresarios y amplios sectores sociales que han sido vìctimas de atropellos y que seguramente votaràn en contra del Partido Revolucionario Institucional.
Ya el diputado local del PRI, Ricardo Ahued Bardahuil, ha sido muy claro y preciso cuando advierte que el reto màs complicado del candidato del PRI será lograr convencer a la población de por lo menos escuchar su propuesta.
Y efectivamente que el legislador local tiene mucha razón cuando reconoce que el candidato del tricolor “deberá analizar bien su discurso y el de sus contrincantes y todavía asì a ver si la gente le cree, porque en realidad la ciudadanía ya no le cree ni a los candidatos ni al partido”.
De esa magnitud es la responsabilidad que tiene en sus manos Felipe Amadeo Flores Espinosa, quien hará todo lo posible para que el abanderado del tricolor gane la gubernatura que por primera vez en la historia política de Veracruz està en peligro.