«Finalmente el Presidente reconoció que la situación económica está para llorar y decidió despedir al responsable de las finanzas nacionales. No debe haber sido fácil para Nicolás Maduro tomar la decisión de echar a Luis Salas, toda vez que el mandatario era el único que creía en su Ministro de Economía. ¿O en quién estaban pensando'». Lo comentan en «Templo Mayor» de Reforma.