¿Cómo vamos a cambiar esto, si todo está contaminado? ¿Qué podemos hacer para lograr los cambios que México necesita? eran los comentarios que Mérida Mar Domínguez escuchaba de sus alumnos de bachillerato cuando les daba clases de historia y veían toda la situación por la que el país está atravesando. Su respuesta siempre contundente era: “Primero tenemos que cambiar nosotros mismos, así como a nuestro entorno más cercano (la familia), ya que, si en ella se da una educación igualitaria e inculcamos valores como justicia, respeto, responsabilidad, entre otros, y los llevamos a los tíos, primos, sobrinos y amigos, podemos ir tejiendo nuevas formas de convivencia”.
Mérida es la actual Coordinadora Estatal del Movimiento de Mujeres del Partido Nueva Alianza en Veracruz, y desde ese espacio está tratando de hacer cambios para que a las mujeres aliancistas y simpatizantes se les forme, capacite, prepare, empoderen, y desde su localidad se visibilicen con la sociedad, para que ésta vea sus capacidades, talento, trabajo y compromiso, y a través de la agenda social de su partido, sean impulsadas en liderazgo político y llevarlas a que ocupen cargos públicos con la finalidad de reducir la brecha de desigualdad entre hombres y mujeres que existe, aterrizar la paridad de género y lograr una igualdad sustantiva.
Independientemente del proceso electoral que está en puerta, Mérida considera necesario que a la mujer se le ayude a romper estereotipos, paradigmas, etiquetas, roles establecidos, pues a veces si la mujer sale a la esfera pública, la sociedad la ve mal, pues considera que abandona su hogar.
En su caso, asegura que es apoyada por su esposo Carlos Alberto, quien le dice “¡date la oportunidad!”, y por sus hijos Milton Carlos, Carlos Daniel y Nimbe.
Originaria de Poza Rica, Mérida tuvo que dejar su hogar y a su familia para desempeñar el nuevo encargo que le dio Nueva Alianza, sin embargo viaja cada semana para estar con ellos. Se considera una enamorada del movimiento de mujeres y de su partido ya que éste toma muy en serio la causa femenil. “Es un partido que da oportunidades”.
En el proceso anterior, confirma que Nueva Alianza impulsó 11 candidaturas de mujeres de las 21 en total, pero que sin lugar a dudas es una gran responsabilidad de los partidos políticos demostrar la coherencia e impulsar a la mujer para cumplir con la paridad de manera efectiva. “Por ley les corresponden espacios, ya no es de pedir”.
¿Ya tienen nombres de algunas posibles candidatas? pregunto. Sonríe y me dice que aún no me puede dar nombres, pues está en el proceso todavía, pero que impulsarán mujeres y cumplirán lo que marca la ley al 50 por ciento. “No se mandarán mujeres a distritos perdedores”.
Mar Domínguez no es ninguna novata en la política, aunque en Nueva Alianza lleva 6 años aproximadamente, en total contabiliza 18 en actividades partidistas.
Antes de que Nueva Alianza existiera, Mérida participó en otras instituciones, pero ante la inquietud de querer ver cambios y no lograrlos, se vistió de turquesa, ya que asegura que su partido prioriza principalmente tres ejes importantes: la educación, pues considera que a partir de ella es que el país puede transformarse; la juventud y las mujeres. Y es a éstas últimas a las que se les debe dar herramientas conforme a la ley para que conozcan todos sus derechos civiles y políticos, así como todos los instrumentos legales para que se sientan fortalecidas y empoderadas.
Confiesa que María de la Paz, su madre, es la que la inspira, pues al morir su padre, cuando ella tenía 6 años, su madre sacó a la familia adelante. “En la localidad le decían María Pantalones, porque hacía cosas diferentes: sabía pintar y hojalatear los carros, tenía un taller de hojalatería y pintura”.
Cuenta con dos profesiones: Licenciada en Ciencias Sociales y Contador Público. Ha sido maestra por casi 30 años de secundaria y bachillerato en las asignaturas de ética y valores, estructura socioeconómica de México, filosofía, contabilidad y administración. Y lo primero que les decía a sus alumnos era: “A mí no me pueden decir que no se puede”; y también para los padres tenía una frase: “Sí se puede, no le diga a su hijo que no puede hacerlo”.
Confieso que me dejó helada cuando me contó una anécdota: “En algún proceso renuncié a una regiduría ganada. Había llegado la persona que quería que llegara; su calidad moral, trabajo y compromiso lo respaldaban. De pronto, él me pide que le ceda el lugar (la regiduría) y como en ese momento no dimensionaba lo que podía hacer en el cargo, que le cedo y le firmo. Después me entero que pone a su esposa… Afortunadamente no albergo rencores… es hacerse daño a uno mismo”.
Me presume su mascada de Nueva Alianza de mujeres de varios oficios y se acomoda el chaleco color turquesa mientras me confiesa que en el transcurso de la historia de México, hace falta que la mujer y los ciudadanos participen, ya que no se puede criticar y mantenerse al margen, pues hay que hacer que la historia cambie.
“Tenemos que aprender a participar, pues si no lo hacemos de nada sirve estar criticando afuera del ruedo, necesitamos entrar al escenario, para que las cosas sean mejores y diferentes, para que las personas que ocupen los cargos públicos sean moralmente cabales, pero si no participamos, el escenario se sigue quedando con los mismos. La política se tiene que dignificar, cambiar etiquetas, además de que la política no es solo partidista, ya que se hace política en todo momento, hasta dentro de la misma familia”.
Ahora que se ha vuelto a encontrar a sus alumnos, Mérida los invita a participar diciéndoles: “Si crees que está contaminado, ven a hacer algo para descontaminarlo”.
+++
Y aunque es lunes de mujeres, desde este espacio mandamos una felicitación a Francisco Javier Pérez Sosa, presidente del Consejo de Administración de la Asociación Civil Fundación Identidad Veracruzana, quien fue pieza importante para que se presentara la Compañía Nacional de Danza en el Teatro del Estado de Xalapa con el Suite El Lago de los Cisnes ¡Esos espectáculos hacen falta en Veracruz! Enhorabuena…
Email:caballero_brenda@nullhotmail.com