La vista es uno de los sentidos más preciados con el que percibimos el mundo. Desde tiempos inmemorables le confiamos nuestro conocimiento del medio que nos rodea. ‘Hasta no ver, no creer’ reza el adagio que se le atribuye a uno de los discípulos del Mesías.
El escritor portugués, José Saramago, escribió una novela esplendida sobre la pérdida del sentido de la vista: Ensayo sobre la ceguera. Nos narra el drama que vive una población por una epidemia de ceguera blanca y las complicaciones que lleva al colectivo por tan extraña y repentina enfermad.
Lo anterior viene a colación porque el pasado 21 de enero se aprobó una reforma que obliga a la certificación de los servicios de optometría en la entidad. Su promotor, el diputado Leandro Rafael García Bringas, advirtió que en Veracruz existen muchas ópticas que ofrecen exámenes de la vista gratuitos sobre todo en escuelas, “es sumamente peligroso porque puede generar daños visuales permanentes en los niños”.
Recuerdo que años atrás las maestra de primaria nos ‘medían’ la vista con una escala para analfabetas y casi siempre acertaban. Habían muy pocos compañeros o compañeras con anteojos. Hoy vemos que no es así y son cada día son más los estudiantes que usan lentes.
Y es que así como tenemos empresas que son honestas, otras sólo buscan el lucro. Incluso con personal no calificado para realizar un examen de vista. En este sentido, el legislador García Bringas comentó:
“Los optometristas sólo hacen estudios aritméticos matemáticos que aplican en enfermedades refractivas y por ende sólo perciben errores refractivos, pero no detectan enfermedades como el glaucoma, una lesión en la retina e incluso tumores, dado que no tienen noción de medicina y menos de oftalmología. Está de moda en las escuelas que las ópticas hagan exámenes a los niños, como si fueran una mercancía y hay muchos menores que andan con lentes, pero no los necesitan”.
Es importante que las autoridades sanitarias y escolares verifiquen qué empresas son las que pueden proporcionar el servicio. Tener un padrón que se les proporcione al personal docente y ellos sean los que orienten a los padres o madres para la realización de un examen óptimo y confiable.
El diputado García Bringas recomendó a los familiares que cuando detecten algún problema de agudeza visual en los infantes practiquen el examen oftalmológico completo y no lleven al niño sólo al optómetra porque pueden variar mucho las graduaciones.
“Todo niño con problemas visuales debe someterse a exámenes oftalmológicos, hay muchos profesionistas que apoyan para hacer labor altruista o en todo caso buscar ayuda de alguna empresa, de esa forma pueden salvarse muchos ojos, porque con seis meses o un año de utilizar lentes inadecuado la gente genera la pérdida parcial o completa de su vista”.
El problema no es menor y debemos estar atentos con la salud visual de nuestras niñas y niños. Por ignorancia confiamos en personas que dicen saber. Yo era una de ellas.
Por hoy es todo, les deseo un excelente día y nos leemos en la próxima entrega.