“La gente está con un nivel de angustia y de preocupación muy importante. Que no sea peor el remedio que la enfermedad”: Daniel Osvaldo Scioli, ex gobernador de Buenos Aires y ex aspirante a la Presidencia de Argentina

Buen día apreciado lector:

Usted que me lee habrá de perdonar la insistencia: después de observar el debate del domingo por la noche, nos queda claro que sólo Héctor Yunes Landa tiene la madurez, la sensibilidad, la experiencia y las relaciones para dignificar al Poder Ejecutivo del Estado y hacer el buen gobierno que tanto nos urge.

Es decir, un gobierno de 24 meses en el que se sienten las bases para recuperar la seguridad pública, una economía sana, y, en definitiva, poner orden en la administración gubernamental de Veracruz.

Este reportero no pretende entrar en polémica con nadie, respeto las preferencias electorales de cada lector y si alguien cree que otro candidato lo haría mejor, es su punto de vista: el que aquí se expresa parte de una base de por lo menos cincuenta años de observar el desempeño de gobernantes y servidores públicos, desde la adolescencia de lejos y con la juventud, de muy cerca.

Estamos en la antesala de decisiones de trascendencia, vitales para el futuro de la vida democrática de Veracruz; del desarrollo armónico y de la tranquilidad para las familias de todos nosotros, de todos los veracruzanos y de la gente que vive en nuestro territorio.

Se trata de la decisión para elegir al próximo gobernador de Veracruz, decisión que nos corresponde a los millones de ciudadanos veracruzanos quienes tenemos la edad legal para hacerlo, y, por supuesto, la respectiva credencial de elector, vigente.

Si bien la elección es para dos años, quien gane podrá influir y hacer compromisos de trascendencia con el que seguirá de seis y al mismo tiempo para de Presidente de la República.

Lo que preocupa a todo mundo acá, es que llegue al gobierno del estado una persona que no haga el buen gobierno que los que votaron por Fidel Herrera Beltrán en 2004 y por Javier Duarte de Ochoa en 2010, creyeron que, postulados por el PRI, harían.

SI NO FUERA HÉCTOR EL CANDIDATO

Ahí está el quid.

Si de juzgar al partido en el poder se tratara, nadie duda que el próximo 5 de junio el electorado emitiría un voto de castigo al PRI por la tan cuestionada actuación de ambos abanderados, pero la elección no es para eso, es para elegir a un buen próximo gobernante.

Aún así la historia registra gobernadores abanderados por el PRI que en general hicieron un buen trabajo y son bien recordados; entre ellos Rafael Hernández Ochoa, Agustín Acosta Lagunes, Fernando Gutiérrez Barrios, Dante Delgado, Patricio Chirinos e incluso Miguel Alemán Velasco.

No me lo crea lector, hay también gente, mucha, que en lo particular recibieron beneficios del cuenqueño y de JD y se la rifan por ellos, pero en lo general el balance resultó negativo por la corrupción e inseguridad que ha permeado en estos dos sexenios.

Durante el proceso anterior de la gubernatura de Querétaro, «aprendí que la gente ya no vota por los partidos políticos, vota por los candidatos», le dijo al Tlacuilo el ex gobernador José Calzada Rovirosa y hoy el PRI ha postulado a un candidato decente y de buenos resultados.

Si no fuera Héctor el candidato, en serio que los priístas deberían estar preocupados, pero incluso ahora no solo lo postula el PRI, también partidos que lo ven ganador como el Verde, el Panal, el Ave y el Cardenista, porque el “Yunes Rojo” es conocido y bien apreciado en todo Veracruz y su trayectoria política es limpia.

Estos temas que parecen reiterativos, como se vio anoche en el debate, son parte de la realidad de Veracruz y son los que debieran estar en la mente del elector a la hora de emitir su voto el cinco de junio venidero.

De los otros candidatos Miguel Angel de hecho fue gobernador y tiene mucha experiencia, acaso su carácter y sobre todo lo combatido que es por sus rivales políticos, no le ayudan, como le pasó en la anterior elección en que perdió a pesar de tener todo el apoyo del Presidente Felipe Calderón.

Cuitláhuac no es conocido en el ejercicio del poder, no tiene la experiencia que se requiere. Tendría que gobernar con el Peje al lado, en tanto que Alba Leonila si cuenta con cierto camino en la difícil tarea pública pero es desconocida en la mayor parte de la entidad.

Juan Bueno, también tiene camino andado en la política, aunque su paso por Pemex no le favorece. Armando Méndez de la luz es un político honesto, fue un excelente alcalde y servidor público del estado pero a su partido le faltó proyección.

En fin, no es posible que en un asunto tan complicado para la vida en sociedad de los veracruzanos se tomen decisiones a la ligera. Si un gobernante del PRI cometió violaciones a la ley debe ser castigado, pero si de todos los aspirantes el que está mejor calificado para, insisto, sentar las bases y reordenar la entidad, es Héctor Yunes, ojalá el pueblo le dé la oportunidad de hacerlo.

Aparentemente con las estructura panista Miguel Angel es el que está en la pelea, pero…

Tenga el lector una semana de paz y armonía en su hogar, en su trabajo y en las calles.

gustavocadenamathey@nullhotmail.com