«Dicen que la omisión también es pecado, y los partidos políticos tendrían que analizar su responsabilidad en la más reciente fuga de la lista nominal de electores que, ahora apareció en la nube de «Amazon». Los institutos políticos no cuidan los medios magnéticos en que reciben los datos personales de millones de mexicanos y eso hace muy posible que caigan en manos equivocadas y sean usados con finalidades ilícitas. A ver si aprenden». Lo comentan en «Confidencial» de El Financiero.