Será difícil que los vehículos cumplan con los nuevos límites permitidos de emisiones contaminantes que establece la norma ambiental, ante la mala calidad de las gasolinas, consideró el senador Mario Delgado.
Incluso, destacó que los lineamientos para la verificación vehicular lejos de combatir la corrupción, la fomenta, al generar incertidumbre para el ciudadano lo que es aprovechado para insinuar o solicitar dádivas.
“Con gasolinas sucias y una norma más estricta será casi imposible que una gran cantidad de vehículos aprueben la verificación vehicular lo que podrá generar que se adquiera otro auto viejo para satisfacer las necesidades de transporte de la familia o se incurra en actos de corrupción para aprobar u obtener un determinado holograma”, señaló Delgado Carrillo.
Consideró que esta nueva norma, además de ser un estímulo a la industria automotriz ante los privilegios que tendrán los autos de modelos nuevos, a todas luces es una acción discriminatoria.
En torno a la determinación de sacar de circulación a los microbuses, consideró que esta debe de ir acompañada de una estrategia para sustituirlos y atender la demanda de movilidad de quienes viven o visitan la Ciudad de México.
“Para deschatarrizar el transporte público es necesario implementar estímulos e incentivos que permitan a los concesionarios renovar el parque vehicular, pues las políticas públicas aisladas no funcionan y está demostrado que son contraproducentes”, expresó el legislador.
Ante ello, el senador presentó un punto de acuerdo en el que se solicita que las autoridades que integran la Comisión Ambiental de la Megalópolis analicen el impacto que tiene la calidad de las gasolinas y diésel que se comercializan en sus respectivas jurisdicciones, para cumplir los máximos niveles de calidad del aire y se evite que las nuevas disposiciones sean incumplidas por los ciudadanos al no haber disponibilidad, accesibilidad y asequibilidad de combustibles limpios y de alta calidad.
En tanto, la diputada federal Melissa Torres Sandoval, secretaria de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, aseguró que la nueva Norma de Verificación Vehicular castiga a los automovilistas y es insuficiente para mejorar la calidad del aire.
La legisladora del Grupo Parlamentario del Partido Encuentro Social (GPPES) coordinado por el diputado Alejandro González Murillo, señaló que ante la urgencia de presentar estas medidas que sólo tendrán una vigencia de seis meses, sólo se proyecta incertidumbre ante la ciudadanía y ausencia de la opinión de los expertos, quienes las pueden perfeccionar aún más para tener un carácter permanente.
Y exhortó a los integrantes de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe), a que difundan en medios masivos de comunicación y no solo en redes sociales, las nuevas medidas de verificación vehicular, para que todos los propietarios de cualquier tipo de vehículo puedan conocerlas.
Pidió que aclaren cuáles autos y con qué holograma dejarán de circular en caso de una contingencia ambiental, a partir del 1 de julio, en el entendido de que aquellos vehículos con calcomanía 0 y 00, según la nueva norma, no dejarían de circular ningún día.
También pidió explicar a la ciudadanía quiénes serán los agentes autorizados para infraccionar y remitir a un corralón a vehículos “ostensiblemente contaminantes”, además se requiere precisar en qué consiste la detección remota.
“Debemos saber si habrá puntos fijos o estarán distribuidos aleatoriamente y si la detección remota incluirá la remisión de vehículos al corralón, con placas de otros estados, sean o no parte de la Megalópolis”, enfatizó.