Buen día apreciado lector:

«La democracia llegó para quedarse», dijo ayer a temprana hora el nuevo gobernador electo de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, luego de recibir del OPLE la constancia que lo valida como tal.
Entre otras cosas se comprometió a que el órgano electoral tendrá el más absoluto respeto del Gobierno del Estado y que su gobierno “será un gobierno democrático y no apoyará a ningún partido político; un gobierno que no participará en las elecciones, un gobierno que no desviará recursos para apoyar a ninguna organización política, un gobierno que luchará para que Veracruz recupere su prestigio».

Eso, de entrada es un gran compromiso que estará vigente en la mente de todos porque en dos años vienen las elecciones para nuevo gobernador y presidente de la República, las que de antemano todo mundo cree, perderá el PRI debido a las malas decisiones del actual Presidente, quien lamentablemente a pocos inspira respeto.

Por lo que hace a Miguel Angel, ya con la autorización del papelito que habla, agradeció a los veracruzanos que votaron por él “y lucharon por la democracia para que la voluntad del pueblo de Veracruz se respetara”.
Es indudable que en el ambiente se percibe un aire de cierta alegría por lo que pasó.

Usted platica con la gente de a pie, o la del taxi o la del autobús y nadie le dirá que hay tristeza.

Pasa como si la gente de Héctor se haya escondido o se haya desaparecido. El mismo Héctor ya no contesta el teléfono a pesar de que tiene todavía toda la simpatía de más del número de veracruzanos que registra la elección y la gran responsabilidad de representar a Veracruz en el Senado de la República y a pesar de que Miguel lo ha dicho a los cuatro vientos que por lo que a él hace, no hay problemas y “evidentemente”, le perdonará ciertos comentarios de tipo personal en la campaña.

Hay priístas sin embargo que aún no se dan por derrotados. Así lo da a entender Marco Antonio Aguilar Yunes, representante del PRI ante el OPLE, quien anunció ayer que su partido habrá de impugnar el resultado.

Todo esto me hace recordar lo sucedido hace seis años cuando el gobernador era Fidel Herrera, el candidato del PAN Miguel Angel Yunes Linares y el ganador, por el PRI Javier Duarte.

En aquel entonces el PAN que apoyaba a su candidato Miguel Angel Yunes decidió impugnar.

Me acuerdo que un miércoles 7 de julio del 2010 y “con el fin de dejar en claro que el PRI ganó la elección de gobernador del domingo 4 de julio pasado, el dirigente estatal priísta en Veracruz, Jorge Carvallo Delfín, aceptó el recuento de votos mediante la revisión de «acta por acta» de las 9 mil 827 casillas electorales”.

Posteriormente, el viernes 9 de julio de 2010, el consejo general del Instituto Electoral Veracruz (IEV) dio por concluido el cómputo oficial distrital de votos de la elección de gobernador, en la que resultó triunfador el candidato de la coalición Veracruz para Adelante (PRI-PVEM-PRV), Javier Duarte de Ochoa.

Los resultados de los 30 distritos electorales fueron enviados al Tribunal Electoral del Poder Judicial del Estado para la sumatoria, calificación y declaración del Gobernador electo el periodo 2010-2016.

Durante la noche del 8 de julio, el órgano electoral dio por concluido el cómputo de la elección de los tres candidatos a la gubernatura de Veracruz en los 30 distritos electorales.

De tal forma que el abanderado priísta obtuvo un millón 392 mil sufragios, mientras que su más cercano competidor, el candidato de la coalición Viva Veracruz (PAN-PANAL), Miguel Angel Yunes Linares, un millón 306 mil sufragios.

El martes 13 de julio el priísta Javier Duarte de Ochoa, candidato a la gubernatura de Veracruz, entregó a la dirigencia nacional de su partido una por una de las actas del escrutinio en los 30 distritos electorales de la entidad y aseguró que ganó a la buena y que el resultado era inobjetable.

En conferencia en la sede nacional del PRI, Duarte de Ochoa acusó al PAN y a su candidato Miguel Angel Yunes Linares de intentar arrebatarle el triunfo con guerra sucia y escándalo.

“Defenderemos la elección que ganamos. Tenemos los documentos legales que lo registran; se trata de una elección limpia, transparente, inobjetable” dijo entonces, mientras en Xalapa, el Comité Directivo del PAN exhortó a los magistrados del Tribunal Estatal Electoral (TEE) “a ser un árbitro intachable, serio y soberano”.

Enrique Cambranis Torres, dirigente estatal de este partido, dijo que solo de esta forma podría ser digno de la confianza de todos los veracruzanos.

Finalmente no mucho tiempo después, el 27 de julio el Tribunal Electoral del Poder Judicial de Veracruz, en sesión de pleno declaró válida la elección del 4 de julio, resultando ganador el candidato de la coalición Veracruz para adelante (PRI, PVEM y PRV), Javier Duarte de Ochoa.
El magistrado presidente del tribunal, Daniel Ruiz Morales, leyó el dictamen con el que se declaró válido el cómputo final, obteniendo la coalición Veracruz para adelante, un millón 357 mil 705 votos.
Por su parte, la alianza Viva Veracruz (PAN y Nueva Alianza) obtuvo un millón 278 mil 147 votos, y Para cambiar Veracruz, 419 mil 700.
Asimismo afirmó que los resultados finales fueron modificados de acuerdo con distintos recursos de improcedencia presentados por algunos partidos políticos, donde hubo la anulación de diversas casillas.
Sin embargo, la mayoría de estos recursos que argumentaban la nulidad de la jornada electoral fueron declarado infundados.
De acuerdo con las argumentaciones presentadas por las distintas fuerza políticas, se esgrimieron rebase en los topes de las precampañas y campaña electoral, y distintas irregularidades presentadas por el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP).
Asimismo, la revelación de resultados de encuestas anticipadas y recursos de procedencia ilícita e injerencia del gobierno del estado a favor de uno de los candidatos de la contienda.
En este último punto, Ruiz Morales señaló que los argumentos consistentes en audio presentados por los promoventes no podían acreditarse como una prueba eficaz, que permitiera llegar a la conclusión del presunto desvío de recursos.
Argumentó que las conversaciones telefónicas son protegidas por la ley y las presentadas por los partidos de oposición se consiguieron sin mandato judicial.
En cuanto a las circunstancias esgrimidas por los partidos de oposición respecto de que la jornada electoral hubo circunstancias que afectaran la tranquilidad de las mismas, el magistrado presidente hizo referencia a que la instalación del 100% de las casillas, el número de electores que se presentaron a sufragar y a que los comicios se llevaron “a cabo de manera tranquila”, hace constar la inexistencia de los señalamientos planteados.
Finalmente, por unanimidad se aprobó el dictamen donde se declaró válida la elección y el candidato Duarte de Ochoa obtuvo la mayor votación de la jornada electoral, por lo que debía declararse gobernador electo en el periodo que comprende del 1 de diciembre de 2010 al 30 de noviembre de 2016.

Así las cosas a ver cómo se resuelve esta vez.

SOBRESALIENTE

*** Hablando de otras cosas. Qué bueno que en Los Tucanes de Coatepec el buen Rafa da lugar y estimula a jóvenes como Irving, como el dueto Sunny y otros talentos de la bella música. Bien hecho no hay que perderlos de vista. Un día serán de renombre mundial.

Tenga el lector una semana de éxitos y alegrías.

gustavocadenamathey@nullhotmasil.com