Muy interesante resulta el hecho que desde estas fechas con fundamento en la nueva disposición legal que de alguna forma obliga al gobernador entrante a presentar en cuatro meses el Pan Veracruzano de Desarrollo 2016 – 2018, haya hecho al Ejecutivo del Estado la petición de permitir a los auditores que él designe trabajar en las instituciones del Gobierno del Estado con la finalidad de recabar información para realizar en tiempo el citado documento.
Hasta el momento de redactar la presente, no tenemos conocimiento de cual haya sido o será la respuesta a la importante petición, pero en el caso de que haya sido y vaya a ser positiva, el Gobernador electo y su equipo de trabajo, seguramente enfrentarán una tarea nada fácil de sacar adelante en un periodo tan corto de tiempo, por dos razones: por una parte la administración estatal es extensa y por la otra, debido a los resultados que estamos viviendo de prácticamente la quiebra económica del Estado de Veracruz, la información gubernamental en su totalidad no debe de estar muy ordenada.
Así tendremos dependencias en las que las dificultades serán mínimas en cuanto a la revisión de su administración, las cuales son las menos. Pero hay otras en las que las irregularidades se vienen presentando desde la primera parte del actual sexenio, el de la llamada “fidelidad”, y que durante esta segunda parte no solamente continuaron, sino que crecieron en forma alarmante.
Por lo que respecta a las que seguramente presenten mayor dificultad en cuanto a su revisión, podemos citar: la Secretaría de Comunicaciones, la de Salud, Seguridad Pública, Turismo, Finanzas y Planeación y otras más del Poder Ejecutivo, así como también el cuestionado Instituto de Pensiones del Estado (IPE).
En cuanto a las irregularidades que presentan la citadas secretarias, podemos anotar que la mayoría de ellas durante los últimos seis años, tuvieron en su titularidad a más de dos servidores públicos diferentes, lo que da una idea de la falta de planeación en cada una de ellas, llegando al extremo la Secretaria de Finanzas y Planeación a tener con el actual titular a seis, uno por año en promedio. Caso en el que no hay mucho que decir, ya que por sí solo el número de secretarios es más que evidente de las irregularidades que debe haber ahí.
El Instituto de Pensiones del Estado, propiedad de los trabajadores del Estado de Veracruz, se puede considerar que desde el llamado sexenio de la “fidelidad” fue la institución más saqueada. Pues tanto sus directores durante la administración pasada y la actual, desde que se les nombró al frente del IPE solo fue para administrar su miseria. Situación que hizo crisis durante el pasado y presente año, debido a los excesos que se tuvo con sus dineros por parte del actual gobierno estatal. Así tenemos que por razones de tipo político, lo que no los libera de su responsabilidad, de los 13 integrantes del Consejo de Administración, la mayoría de ellos han tenido que dar su voto a favor de las peticiones de la administración estatal, y que han sido en perjuicio de la institución. Quedando al margen de este forma de votación, porque siempre lo ha hecho en favor de la misma el FESAPAUV, seguido de otras organizaciones magisteriales como SETSUV, SETSE, SEDTEV y el Sindicato del Poder Ejecutivo del Estado. Acciones que están asentadas en las diferentes actas de las sesiones del respectivo Consejo. Hasta el viernes. Noti-sigloxxi@nullhotmail.com (Fech. Púb. Miér.15-junio-16)