AUNQUE Miguel Ángel Yunes Linares, Gobernador electo, para el próximo periodo gubernamental de dos años, bien ha entendido que vale más actuar con inteligencia, que mantener la guerra política con el actual gobierno, como una estrategia de presión, todo indica que no recibirá una respuesta positiva a la solicitud, enviada en dos sendos escritos a quien todavía manda en Veracruz, para que de una buena vez se comience el proceso de transición.

El nuevo Gobernador, tendrá que esperar hasta el mes de noviembre para delinear sus proyectos políticos y materiales, que sin duda, tendrán que ir dentro de un plan de gobierno que la misma ley le exige y que ha mencionado en los textos entregados al gobierno, mediante los cuales, pide autorización para que los funcionarios, ya nombrados, para recibir la administración en curso, intervengan directamente en las dependencias gubernamentales.

Miguel Ángel Yunes Linares, se ha serenado y por la vía más correcta ha enviado sus primeros documentos a la administración pública estatal, principalmente, a quien encabeza, todavía, el Gobierno del Estado, para empaparse de lo que esta sucediendo en su administración.

Pero no, hasta ayer, se sabía que la respuesta sería en sentido negativo, pues nadie se arriesga, en este momento, a entregar información precisa y adecuada para formular el nuevo Plan de Trabajo, para la siguiente administración, aunque la ley, efectivamente, le este exigiendo al Gobernador electo, la presentación de este documento que, sin duda, será parte del protocolo que se sigue en estos casos para iniciar su gobierno.

De esta manera, Yunes Linares, tendrá que esperar estos cuatro meses, por lo menos, para poder recibir una respuesta positiva a sus solicitudes, de tal manera, que el trabajo que deba realizar para cumplir con el aspecto legal, se tenga que detener hasta en tanto no se tenga la información adecuada a la mano.

Miguel Ángel Yunes Linares, en los dos oficios que fueron entregados anteayer en la oficina del Gobernador, pide a Duarte gire instrucciones a todos los titulares de las dependencias y entidades del ejecutivo para que rindan un informe de los asuntos a su cargo y el estado que guardan, destacando las acciones y compromisos en proceso y que requieran atención especial.

Pero, el político de Soledad de Doblado, ahora convertido ya en Gobernador electo del Estado de Veracruz, hizo hincapié, dentro de la solicitud enviada al titular del Poder ejecutivo de Veracruz, en que haga del conocimiento de todos los servidores públicos que deben guardar reserva de la información a la que tienen acceso con motivo de su empleo, cargo o comisión, en términos de la ley y cuya divulgación cause perjuicios a la institución para la cual se desempeña; asimismo, evitar su mal uso, destrucción, ocultamiento o inutilización.

Las cosas, de esta manera, se ponen, nuevamente, en el caldero y se genera un posible enfrentamiento, que nada tiene que ver con el mensaje reciente del Gobernador Javier Duarte de Ochoa, en el sentido de dar paso a un proceso de reconciliación política, que necesita Veracruz.

Nada de eso

El Gobernador electo también le solicita a Duarte, que permita a las comisiones y auditores, que él designará, para que puedan obtener información de la situación de todas las áreas de gobierno, así como practicar las auditorías y reuniones de trabajo que sean necesarias con los servidores públicos del gobierno del estado.

Pero, nada de eso, también.

Ahora más que nunca, el acceso a la documentación de la actual administración pública estatal, estará cerrado, hasta en tanto no lleguen los tiempos en que, necesariamente, se tengan que abrir todos los archivos.

Por ahora, tal y como se ha conocido desde ayer, no se podrá cumplir con los deseos del Gobernador electo, de comenzar ya, ya, ya, la investigación correspondiente del estado que guarda la administración pública estatal.

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HECTOR YUNES Landa, fue el primero en reconocer públicamente que los resultados de la elección del domingo cinco de junio, no le favorecían y que por lo tanto, aceptaba, de alguna manera, su derrota.

Vino una especie de silencio en por lo menos veinticuatro horas, las cuales sirvieron para todos, dentro de la pausa política, necesaria, sin duda, para la reflexión.

Vino, posteriormente, la reacción del tricolor y a través de sus dirigentes estatales, se negaba a aceptar un panorama adverso, difícil para sus propios intereses y pidió que se abrieran los paquetes electorales, con la consabida responsabilidad que esto implicaba, porque se corría, sin duda, el riesgo de perder con más votos, todavía.

Y aunque esto ya es historia, lo comentamos, porque ahora, Héctor Yunes Landa, en su calidad de Ex candidato a la gubernatura del Estado, vuelve a comparecer en el escenario político estatal, para hacer un llamado, dentro de la nueva realidad política de Veracruz, para construir un nuevo acuerdo político, mediante un diálogo civilizado al cual esta dispuesto, esperando que la reconciliación que tanto urge a Veracruz, se concrete con políticas incluyentes que, de verdad, las validen.

Dentro de este nuevo panorama político, Yunes Landa, entiende que son tiempos de ceder y conceder, aceptando que la guerra electoral, ya pasó y que es preciso, de alguna manera, sustituir la mezquindad de ayer y de hoy, por una política de altura.

Y la pregunta es:

¿Será posible, que dadas las circunstancias que predominan en el marco político de Veracruz, Héctor Yunes Landa, sea escuchado?

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DESDE HACE TIEMPO, a Javier Duarte de Ochoa, se le viene responsabilizando de todo. Y en ese sentido, tiene toda la razón el economista, pero sobre todo, politólogo Rafael Arias Hernández.

El Gobernador del Estado, se viene quedando solo, cuando en realidad, suenan las campanas del rumor de que una gran parte de todo lo que se pudiera encontrar de malo en su administración, es también responsabilidad de un nutrido grupo de personajes que le traicionaron.

Esto lo comentamos desde hace tiempo, que el gobernador Duarte de Ochoa, había sido traicionado por algunos de sus colaboradores y que en consecuencia, el paquete se lo habían endilgado con la presunta idea de responsabilizarlo directamente al final de su gobierno.

Como titular del Poder Ejecutivo de Veracruz, ha aguantado mucho, pero la verdad, es que podría, de la noche a la mañana, dar su golpe de timón, no en contra de quien lo ataque ahora, sino directamente con quienes lo pusieron en este camino.

De ahí que no es difícil, al comenzar las investigaciones, que de verdad caigan los que ya han sido señalados desde hace tiempo.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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