«Un milagro podría darse en San Lázaro: la resurrección del panista Gustavo Madero. Después de que el-dirigente nacional no consiguió que su sucesor Ricardo Anaya lo nombrara coordinador de la bancada el año pasado, el chihuahuense ha andado como alma en pena por los pasillos del Palacio Legislativo. Pero ahora se dice que el propio Anaya- quien está buscando la unidad del partido- quiere que Madero sea el reemplazo del ex-dirigente nacional perredista Jesús Zambrano como Presidente de la Mesa Directiva a partir de septiembre». Lo comentan en «Templo Mayor» de Reforma.