Estamos a un mes de que tome protesta la Asamblea Constituyente, que entra en funciones el 15 de septiembre, «hay que recordar que esta Asamblea Constituyente sólo va a durar unos cuantos meses, porque a más tardar el 31 de enero del próximo año tiene que estar completamente discutido el proyecto que mande el Jefe de Gobierno, modificado por la asamblea», indicó Mauricio Tabe, presidente del PAN en la Ciudad de México.
«Nosotros consideramos que nos está ganando el tiempo, el Jefe de Gobierno ya tiene que convocar a los líderes de los partidos políticos para aceptar posiciones respecto a la propuesta que va a mandar del proyecto de Constitución, no está obligado, pero si sería conveniente para evitar que tuviéramos fuertes encontronazos al momento de presentar la propuesta», agregó, que por lo cual hace un llamado para que sea lo más pronto posible.
En entrevista para el espacio de «Fórmula Detrás de la Noticia» dijo que entre los rasgos que debe tener la Constitución es que sea sencilla, «muy clara sobre los principios de funcionamiento de la ciudad y que establezcan la distribución de los poderes y la organización de los poderes públicos». Subrayó, que «cada uno de los entes tenga muy clara la función y responsabilidad de lo que debe hacer y que evitemos estos caminos engorrosos que a la ciudadanía le representan un verdadero obstáculo burocrático», que esta Constitución deje muy claras y bien delineadas las responsabilidades de las autoridades.
Destacó que «los constituyentes debemos dejar de lado intereses de particulares y pensar en el funcionamiento de la ciudad, y pensar en el funcionamiento de la ciudad y cómo hacemos una ciudad mucho más ordenada, mucho más incluyente, una ciudad donde la discrecionalidad, la improvisación, el cortoplacismo, muchas de las formas en las que se toman decisiones en la ciudad, que son verdadero obstáculo para que salga adelante».
Añadió, «entonces los constituyentes no tenemos que estar pensando en los acomodos políticos ni en las conveniencias de los partidos, la Constitución tampoco puede ser una bandera ideológica (…). Tenemos que estar muy aterrizados del alcance que tiene esta Constitución para la Ciudad de México, para no elevar las expectativas de lo que no se puede, que sea nada más un compendio de mentiras o de fantasías que no se pueden realizar. Yo creo que la Constitución no puede ser bandera ideológica de nadie ni puede ser la antología de un grupo político».
