Por Ramón Durón Ruíz (+)
Ernest Hemingway afirmó: “Este no es el momento de pensar en lo que no se tiene. Es el momento de pensar en lo que puede hacerse con lo que se tiene”
¿Y qué es lo que tienes? Un racimo de milagros a tu disposición, para recibirlos, sólo necesitas abrir tu alma y llenarla de gratitud y de amor.
Una pizca diaria de amor y de gratitud, llena tu cuerpo del aroma más espectacular. Te lleva a gozar el presente, a ser feliz en el AQUÍ Y EL AHORA, a compartir toda la felicidad con la gente, a gozar cada momento del breve espacio de tu existencia, porque de eso se compone la vida de tiempo, espacios y momentos.
El ser humano de todas las razas, –sin razonar, simplemente fluyendo con la vida– inclina la cabeza al lado derecho para coquetear a su pareja, para demostrar afecto y para besar.
Los fetos y los recién nacidos, tienden a dormir con el cuello inclinado hacia la derecha, la mayoría de las madres cargan y dan pecho a su bebe del lado izquierdo, porque ahí está el corazón, –que no sólo bombea sangre, es la fuente primaria de amor–, dejando libre el lado derecho para besos y caricias. De ahí que simbólicamente se asocie el lado derecho con el cariño, el lado izquierdo con el amor incondicional.
Cuando haces tú tarea bajo el impulso del amor, participas con alegría en la fiesta de la vida, haces una luna de miel con el nuevo día y todo lo que realizas está llamado a la abundancia y a tener éxito, porque lo que nace del amor está llamado a prosperar.
El poder del amor es la energía que mueve al mundo, todo lo atrae, todo lo puede, bajo su magia la vida se transforma en una obra maestra.
Para el viejo Filósofo no hay trabajo, ni matrimonio, ni relaciones perfectas, las hay sí saludables, saludables significa no a la ausencia de problemas, sino la inteligencia, la sensibilidad y el amor para saber manejarlos adecuadamente.
HOY es vital que reconozcas que el tiempo sirve para construir tu historia, la clave es que lo hagas tuyo, siente que está hecho especialmente para ti, no lo dilapides, –esa frase: “aquí estoy perdiendo el tiempo”, es una lápida para tu crecimiento– llénalo del poder del amor, que armoniza, equilibra y fortalece tu visión del presente, entonces la vida te sorprenderá con un racimo de milagros que tiene para ti.
El miedo es una emoción que manifiesta la ausencia del amor, afecta, debilita y desequilibra tu energía vital, HOY hecha los miedos afuera, desaste de ellos, entonces aprenderás a amarte a ti mismo, te conectarás con la fuente primaria de la vida, que siempre te invita a pensar en positivo.
El amor tiene la magia de cambiar los problemas por soluciones, lo complejo, por lo sencillo, lo imposible, por lo posible, los tropiezos, el éxito creador, HOY, DATE PERMISO para que el amor que vive en ti salga a flote, hazlo parte del día a día, que sea una constante que te renueve fisca, emocional y espiritualmente, el amor siempre es una buena nueva.
El amor y el humor, son el alfa y el omega de la vida del Filósofo, el amor porque te salva de cualquier infortunio, porque te une a la fuente de la vida y te enseña que dos almas no se cruzan por casualidad; el humor, porque te enseña que lo que tienes lo tienes, ha llegado a ti para tu bien, el humor es el resplandor de una alma agradecida por el milagro de la alborada que nace.
A propósito del humor, “la soltera empedernida del pueblo, viendo cercano el momento de su partida, mandó llamar al marmolero para que en la fosa en donde estaban sepultados sus padres, misma en la que sería sepultada, grabara en la lápida, para ella, el siguiente epitafio:
‘Aquí yace una mujer que nació virgen, vivió virgen, trabajó virgen y murió virgen’
Preocupado por la cantidad de palabras, el marmolista le pregunta al Filósofo: no caben en la lápida… ¿qué ‘ingaos hago?
— Muy sencillo –le dice el Filósofo–, ponle: ¡Devuelta…SIN USAR!”