«El saldo de las elecciones del 5 de junio envalentonó tanto al PAN que sus legisladores han desconocido acuerdos que en su momento pactaron con el gobierno. En materia presupuestaria se comprometieron a respaldar al ejecutivo federal, pero han cuestionado el proyecto que éste envió a San Lázaro. El PRI, por su parte, estableció el compromiso de no continuar con la impugnación en Aguascalientes, pero la soberbia del blanquiazul podría conseguir que las cosas cambien. Está pendiente el veredicto final, y los priistas tienen todo para hacer tambalear al panista Martín Orozco. Está por verse quién estira más la liga y quién paga los platos rotos». Lo comentan en ¿Será? de «24 Horas».