«Romperemos el ciclo de amnistía y migración ilegal. Nuestro mensaje para el mundo será: no pueden convertirse en ciudadanos entrando ilegalmente a EU», aseguró hace unos meses Donald Trump, candidato republicano a la Casa Blanca, durante un mitin en Arizona tras reunirse con el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto en la Ciudad de México.
Bajo el lema «Make America Great Again» (Haz a América grande de nuevo), los ejes primordiales de su campaña se centran en la construcción de un muro fronterizo – que México pagaría – y la deportación masiva de cerca de 11 millones de inmigrantes.
Aún bajo estas premisas y motivados por el cansancio que supone la retórica política de siempre y la corrupción imperante en el sistema estadunidense, existen muchos latinos que aseguran que el magnate de bienes raíces es la mejor opción a la presidencia de EU.
De acuerdo con un sondeo publicado por Pew Research Center, los latinos integran una comunidad de 27.3 millones repartida entre los distintos estados y por lo tanto con distintos estilos de vida e idiosincrasias.
En el sondeo realizado a mil 507 personas, 64 por ciento de los hispanos aseguró que se identifica con el Partido Demócrata, contra el 24 por ciento que reconoce como simpatizante del Partido Republicano.
Entre los simpatizantes hispanos que Trump ha ganado a lo largo de la contienda, 60 por ciento se reconoce como conservador, 30 por ciento como moderado y tan sólo el seis por ciento como liberal.
Aún cuando tras su discurso xenófobo pareciera una contradicción apoyar al magnate de bienes raíces, los latinos aplauden y apoyan su trayectoria en los negocios, además de su sinceridad y visión, alejada de la vida política de los típicos gobernantes.
En su mayoría los seguidores latinos de Trump dominan el inglés como primera lengua, es decir el 60 por ciento de los encuestados, frente al 35 por ciento que maneja inglés y español y tan sólo el cinco por ciento que entiende únicamente español.
Ocho de cada 10 de sus seguidores hispanos nacieron en EU (83 por ciento) por lo que entender y apoyar el mensaje del candidato va más allá de sus raíces pero las metas que se fijaron a futuro.
Inspirados por «el sueño americano» que vive un hijo de inmigrantes, quien logró ser un exitoso empresario, y candidato a la Casa Blanca; Los hispanos buscan replicar esta meta en las generaciones que les suceden.
Los hispanos son una cultura «primitiva» y «subdesarrollada» aseguraba en septiembre el fundador de «Latinos for Trump», el mexicano Marco Gutiérrez. Tras asegurar que el discurso de Trump es áspero pero necesario.
Este no ha sido el único grupo que ha surgido; en redes sociales se crearon varios perfiles de apoyo al candidato republicano, como «Latinos/Hispanics for Donald Trump» que cuenta con más de 29 mil seguidores en Facebook.
Los mensajes del magnate que en un principio fueron agresivos y nacionalistas, se han suavizado en el transcurso de la campaña, tras ir perdiendo fuerza – además de simpatizantes – frente a la demócrata Hillary Clinton.
No todo ha sido apoyo al candidato republicano, dos miembros del Consejo Nacional de Asesores Hispanos, un grupo de 23 conservadores Latinos, anunciaron en septiembre que retiraban su respaldo al candidato tras la radicalización de su discurso.
Además, en los últimos días, miembros del partido republicano han dado la espalda al empresario tras una serie de escándalos de abuso sexual en su contra.
Si bien es cierto que el candidato ha mantenido una retórica ofensiva contra la comunidad latina, también lo es destacar que este ha sido el motor para una homogenización de ideas bajo un sólo objetivo, no permitir que llegue a la presidencia de los Estados Unidos.
