De Stevenson: “Siempre llevo dos libros en el bolsillo, uno para leer y otro para escribir en él”. Camelot

VERACRUZ ARDE

Llego y tristeza da mirar a Veracruz. No había día que en noticieros de Univisión o Telemundo no soltaran cosas malas nuestras. De cómo quedamos, de cuánto debemos y de que no hay forma para pagar. Y el insensible secretario Meade (José Antonio Meade), que aparte es amigo personal y colega de escuela de Pepe Yunes Zorrilla, debe buscar la forma de emplear un Plan Marshall, o de un Fonden para rescatar a Veracruz. Porque esto fue un desastre no natural, humano. Saquearon las arcas. El gobernador electo, Miguel Angel Yunes Linares, a pocos días de protestar, no solo protestará por un sueño que siempre tuvo en su vida y carrera política, ser gobernador, nunca soñó con encontrar la casa destruida, que no dividida. Es lastimoso ver a los trabajadores del Sector Salud implorando por su paga, por algo que ya cumplieron, marchando como ahora en Orizaba bajo una llovizna chipi chipi y un poco de frio, al igual que en varias partes del estado, que el trabajo es honrado y sagrado, el Papa Francisco ha dicho del trabajo: “El trabajo es sagrado, el trabajo da dignidad a una familia y debemos rezar para que no falte el trabajo a ninguna familia”. Y a la falta de ello: Al respecto dijo que su falta: “daña también al espíritu, como la falta de oración daña también la actividad práctica”. El Pontífice subrayó que “trabajar –repito, en mil modos– es propio de la persona humana. Expresa su dignidad de ser creada a imagen de Dios. Por eso se dice que el trabajo es sagrado, el trabajo es sagrado”.

LOS AVATARES

Ahí andan en esas, dilucidando cómo pagar y no atrasarse y mientras el padre o la madre llegan a la casa sin la quincena, sin nada para sortear los compromisos de la comida, de la renta, del quehacer diario, las escuelas de los hijos. Pobre Veracruz. La verdad nunca nos merecimos esta odisea negra de un final que nadie esperaba. Sorpresivo para todos, aún para los que continúan adentro. Y los que llegan, ya no saben por dónde revisar tanto boquete en ese Titánic que hundido está y no tienen salvavidas ni botes, ni siquiera los músicos que tocaban con profesionalismo, cuando el barco se hundía. Algo muy favorable es que el gobernador electo no pierde el ánimo. Ha dicho hasta el cansancio que no se rendirá por sacar adelante esta crisis de emergencia. Y rodeado de los suyos, quienes colaborarán con él, en ese corto gobierno de dos años, tendrán que emplear horas extras y laborar a descampado, a la intemperie o cómo se animen, reducir costos inútiles y conservar a la gente que trabaja, porque ellos no tienen ninguna culpa de la crisis. Fuera sí, quienes no lo hacen, pero sé que Miguel Angel será respetuoso de quienes laboran con honestidad y eficiencia. Tiene un algo a su favor, no es un político improvisado, años y años de bregar en la política, años y años de tener luces y sombras, triunfos y reveses, porque en su camino perdió elecciones y no se derrotó, volvió a tomar el impulso que se le da a la gente que quiere sacar adelante compromisos. Habrá que apoyarle en todo, porque si a él le va bien estos dos años, a Veracruz también, y a nosotros, que aquí vivimos toda nuestra vida, en este pedacito de patria que Lara le cantó con sentimiento, es cuando necesitamos regar con nuestras lágrimas la esperanza que en nuestro jardín ha de ser siempre la última flor que se marchita. Porque no hay noche tan larga capaz de detener un día nuevo. Ni “hay mal que dure cien años”, es bueno pensar cuando llueve que esa tristeza fecundará la tierra para la primavera. O como dijera aquella canción de The Birds, tomada del libro del Eclesiastés, Turn, Turn: “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar. Y también que es don de Dios que todo hombre coma y beba, y goce el bien de toda su labor”.

CORREO LECTOR

Estimado Gilberto, lo saluda su amigo Héctor Gutiérrez Hernández desde Monterrey N.L., me dio gusto reencontrarlo gracias a que lo vi en los contactos de nuestro amigo en común Corichi de Xalapa, y lo recuerdo mucho a usted por la oportunidad de haber trabajado en su proyecto de Macrovideocentro Xalapa a la orden de su hija, Marimar. Me da mucho gusto verlo sano y tan activo como siempre, ahora lo veo en New York en donde también tuve el gusto de vivir unos meses en Forrest Hills, cerca del Queens Boulevard. Y guardo gratos recuerdos de lo que usted comparte en sus fotos. Actualmente soy Licenciado en Administración de Empresas y llevo muchos años en Monterrey, adonde me casé y tengo unas clínicas dentales propias. Participe mi saludo y mejores deseos a su distinguida familia y gracias por aceptar mi invitación, a mí como a usted me gusta la narrativa y su sección en Facebook es la mejor idea que he visto en años, por favor cuente conmigo y reciba un abrazo cordial. Bendiciones. Saludos!!.

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