AMÉRICO ZUÑIGA Martínez, alcalde de Xalapa, ha llegado a la meta de su trabajo municipal para tres años. Sin embargo, falta uno, quizá, el más difícil, tanto por las condiciones económicas que se viven actualmente en el Estado, y que necesariamente se reflejan en los Municipios, como por el debido cumplimiento de todos los compromiso contraídos con la ciudadanía.

Van tres años de esfuerzos, totalmente evidentes, para hacer lo que se tiene que hacer en un Municipio, que a pesar de ser la capital del Estado, se le ha relegado continuamente por cuanto se refiere a la inversión y a la atención directa del Estado y la federación.

Mucho ha costado a los alcaldes anteriores hacer un trabajo de beneficio social, porque no se han dado los recursos necesarios para lograr una gran obra. Lo que se ha hecho, se enmarca, precisamente, dentro del mero interés de los autoridades municipales, pero sin mayor respaldo que la unidad del pueblo y los diversos sectores, para avanzar por los caminos de la superación.

Sin embargo, el resumen ofrecido por el alcalde, la tarde-noche de ayer, en uno de los inmuebles que se han modernizado, para beneficio de la habitantes de este municipio, muestra claramente, que además del interés que se ha puesto para hacer un buen trabajo municipal, ha existido también, la plena voluntad de un equipo comandado por él, para dar cumplimiento cabal a los proyectos y programas que se han conformado desde el inicio de esta administración.

Los resultados que se encuentran en el documento dado a conocer ayer, constituyen, de alguna manera, una respuesta clara a las peticiones de la sociedad y a los compromisos adquiridos, tanto en una campaña electoral, para obtener el voto, como por el propio anhelo de los servidores públicos que le han acompañado al alcalde en su misión.

A través de estos tres años, se ha dado un verdadero liderazgo, un desempeño administrativo transparente, eficaz, concreto, que ha servido, indudablemente, para transformar a Xalapa, tal y como lo estamos observando todos los días.

Hay quienes se han preguntado y con toda razón, como es que le hace Américo, cuando sus recursos se han visto disminuidos y a veces negados, y la respuesta no ha sido otra que la misma que ha dado el alcalde en varias ocasiones, es decir, cuidando los recursos disponibles, aplicándolos directamente y con transparencia para evitar las desviaciones, las tentaciones y los intentos de corrupción que dañan profundamente los recursos que se tienen.

Américo Zúñiga Martínez, ha caminado por senderos espinosos, pero ha salido airoso y se ha convencido que solamente el trabajo honesto, es el que dignifica definitivamente al hombre, al servidor público, al funcionario y en general a todo aquél que forma parte del quehacer político.

Sus logros, se han convertido en una gran confianza del pueblo xalapeño y es por eso, que ahora, se encamina a ser uno de los mejores alcaldes que se tienen en Veracruz.

No se descarta que en otras regiones del Estado, los resultados de las gestiones municipales, sean destacados y de gran valía, pero en Xalapa, es evidente, que hay voluntad para ejercer el poder y en beneficio de los propios ciudadanos de esta capital, al grado de que por todas partes, se ven reflejados los beneficios a la población.

Américo, ha cumplido en estos tres años de gobierno. Ha dado resultados y que pueden corroborarse en el documento que contiene el tercer informe de labores al frente de la administración pública municipal, pero falta uno, va por el cuarto, el más difícil, el más comprometido, aunque eso sí, con la fuerza, con el respaldo ciudadano y una gran confianza de su gente a la que se ha dedicado permanentemente, a la que sirve todos los días, a la que ofrece su trabajo, aún cuando todo parezca, por momentos, que se enrarece el clima político y económico que le rodea.

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VERACRUZ, ES UN ESTADO que lo tiene todo. De ahí que hayan surgido, insólitamente, voces que proponen desincorporar, no tan solo fiscalmente, a la entidad veracruzana, de la federación, sino también, desde el punto de vista político y territorial, dejando el pacto federal, a un lado, por el solo hecho de que la federación se ha negado, permanentemente, a coadyuvar en el rescate financiero de Veracruz.

Es una propuesta que ha surgido de voces populares, pero que ahora, se tiene entendido, que también la ha tomado el mismo Gobernador del Estado, con el respaldo del congreso local, lo que vuelve preocupante esta situación, porque desde la federación, se ve el asunto como un tema sumamente delicado.

Hasta ahora, no se han dado mayores pronunciamientos a esta propuesta, sobre todo, de Diputados locales y Senadores de la República, por lo que podrían darse opiniones encontradas, de acuerdo con las condiciones políticas que imperan en el Estado, donde los partidos políticos opositores al PAN, se negarían rotundamente a que se imponga esta voluntad para acordar la desincorporación y establecer para el Estado de Veracruz, su propio sistema recaudatorio y hasta, en el futuro, su propio gobierno, lo que se ve muy difícil de que suceda, aunque hay, de alguna manera, condiciones para que se puedan dar estos hechos.

Esta medida se puede consideración una especie de presión para el gobierno federal, que se ha mantenido en su posición de no apoyar al gobierno del Estado, en el empeño de lograr superar la crisis financiera que padece a raíz de los enfermos saqueos de los funcionarios del pasado, encabezado por el Ex gobernador de la entidad, Javier Duarte de Ochoa.

Esta propuesta podría cobrar fuerza y hacer mella en el gobierno federal, si no se toman, cuanto antes, las precauciones del gobierno federal, así como las medidas para apoyar a Veracruz, que en realidad, es una necesidad urgente, además de que sigue siendo un Estado, con grandes perspectivas de cambio, de progreso y desarrollo total.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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