El alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco, se instaló en huelga de hambre en el atrio de la Catedral pasada la medianoche. Blanco reveló que se instaló en la Catedral porque el Obispo, Monseñor Ramón Castro, se lo sugirió. «No me voy a dejar, no me voy a dejar y no me voy a dejar», advirtió tumbado en el suelo, enchamarrado y sosteniendo en su mano un vaso con ponche (¿seguro de ponche?). Está protestando por el juicio político que le abrió en su contra el Congreso local. Quiere que el pueblo se le sume. La nota es de Mayolo López en «Reforma».