El embajador ruso en Turquía murió el lunes en un ataque armado en Ankara, dijo el ministerio ruso de Relaciones Exteriores, calificando el incidente de «acto terrorista».
«Hoy en Ankara como consecuencia de un ataque, el embajador ruso en Turquía, Andrei Karlov, sucumbió a sus heridas», afirmó la portavoz del ministerio, Maria Zakharova, en declaraciones a la televisión.
«Calificamos lo que pasó como un acto terrorista (…) Los asesinos serán castigados», dijo la portavoz.
Desde la capital turca el alcalde de Ankara Melih Gokcek, informó en su cuenta Twitter que el «atacante es un policía».
El diario progubernamental Yeni Safak, amplió que el asaltante es un miembro de las fuerzas antidisturbios.
La agencia estatal turca Anadolu dijo que el asaltante había sido «neutralizado» en una operación policial, sin dar más detalles.
El atacante, vestido con un traje negro, disparó contra el embajador ruso durante la inauguración de una exposición en Ankara, gritando «Alepo» y «venganza», según un testigo.
«Pasó durante la inauguración de la exposición», dijo Hasim Kilic, periodista del Hurriyet daily, que se encontraba en el lugar.
«Cuando el embajador estaba dando un discurso, un hombre alto, con traje, disparó al aire y después apuntó al embajador», según Kilic.
«Dijo algo sobre ‘Alepo’ y ‘venganza’. Ordenó que los civiles salieran del lugar. Cuando la gente estaba huyendo, disparó de nuevo», agregó.
El ataque tuvo lugar en el Cagdas Sanatlar Merkezi, un destacado centro de exposiciones en el barrio de Cankaya, donde se encuentran la mayoría de embajadas, también la rusa.
El incidente se produjo días después de las protestas en Turquía contra el papel de Rusia en Siria, aunque ahora Moscú y Ankara están trabajando juntas en la evacuación en Alepo.