AUNQUE pocos lo crean, la verdad de las cosas, es que los veracruzanos, por lo menos, están resintiendo el grave problema de la carestía económica, aunada, sin duda alguna, a la gran debacle que se viene generando desde pasados los dos gobiernos estatales.

De esta manera, la cuesta de enero, se adelantó en una mini cuesta a este mes de diciembre, pues en los últimos días que están corriendo se nota una gran preocupación en las familias por salir adelante.

El gobierno del Estado, salió a tomar al toro por los cuernos y resolvió, apuradamente, los grandes compromisos contraídos, independientemente de los que se consideran como institucionales, y que tiene que resolver el actual gobierno, por considerarse que son deudas y compromisos de carácter institucional.

La mini cuesta se viene sintiendo desde meses atrás, pero ha llegado a su pico más alto en este mes de diciembre, pues la navidad pasó entre grandes dificultades de las familias veracruzanos, que tuvieron, en su mayoría, que acudir a los centros de préstamo de ultima hora.

Así, el mero día veinticuatro, se vieron largas filas en el Monte de Piedad, así como en otros negocios de esta clase para empeñar lo que se pudo con la finalidad de completarse para comprar lo necesario para la cena de navidad, la cual fue ahora más austera que nunca, porque no hubo recursos suficientes para pasarla mejor.

Y todo esto, no hay la menor duda, de que tiene un origen, es decir, la pésima administración de los dos gobiernos anteriores, principalmente, el reciente encabezado por Javier Duarte de Ochoa, quien a pesar de que hace unos días se le incautaran propiedades y se le hicieran regresar algunas mínimas cantidades de dinero, si tuvo para una navidad con todo, incluyendo los caros vinos que se llevó de la cava que tenía en Casa Veracruz.

Y ojalá que la conciencia no le haya molestado en estos días, cuando miles de familias veracruzanas, no tuvieron para la cena o para poder comprar lo necesario para pasar esta fiesta de la navidad, porque entonces, tampoco, seguramente, que le supieron bien los viandas que seguramente degustó en la fiesta de la navidad.

Pero en fin, las cosas ya pasaron. Los veracruzanos, también ya están en pie de lucha para salvar los grandes obstáculos que se les presentaran para el mes de enero, cuando tengan que enfrentar la nube de precios altos que habrán de generarse por el aumento a los combustibles, principal motivo para que todo suba de precio. Hay que recordar que la nueva política del gobierno federal, será liberar el precio del combustible, lo que de pronto, habrá de alborotar los precios que se dispararan por todos lados, pues ya se piensa que el litro de gasolina, estará sobre los dieciséis pesos, aproximadamente, sin que los salarios tengan un incremento igual o por lo menos suficiente para que no impacte nocivamente la economía familiar.

Este va a ser uno de los grandes temas que se tendrán que discutir todos los días, porque aunque no se quiera, este asunto de los combustibles, ha sido el temor más grandes, económicamente hablando, por los efectos colaterales que produce, como es el alza inmediata de los precios de canasta básica, así como una escaldada de precios altos que nadie, por lo pronto, podrá detener.

El alza de los combustibles, es un fantasma económico que se aparece cada principio de año, aprovechando que todavía, para estos días, hay un poco del aguinaldo recibido, pero como ahora, esta prestación se vio reducida en las empresas que no tuvieron para cumplir con sus compromisos, porque sencillamente, no obtuvieron ingresos suficientes y en algunos casos, el gobierno del Estado, no les ha pagado lo que la anterior administración estatal, les quedó a deber.

Es así como la mini cuesta económica, empezó a surtir sus efectos, desde los meses anteriores a diciembre, pero con más impacto en los recientes veintiséis días que llevamos de este fatídico mes para los veracruzanos, en general.

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EL ALCADE DE XALAPA, Américo Zúñiga Martínez, ya comenzó a gestionar ante el gobierno del Estado, el retorno del manejo directo de la Dirección General de Tránsito Municipal.

Y tiene toda la razón, porque desde hace muchos años que Tránsito del Estado, ya no tiene la capacidad suficiente para atender esta parte de la administración estatal, principalmente, por la falta de elementos capacitados, en virtud de que no cuenta con recursos par poder contratar a personal que sepa de esta actividad, aparte de no haberse preocupado por parar la enorme corrupción que ha lastimado profundamente a la dependencia, así como a la misma ciudadanía que tuvo quejas permanentes del hacer y deshacer de los elementos que cuidaban, supuestamente, del tránsito en las principales ciudades de Veracruz.

Por esa razón, el alcalde xalapeño, pide ahora que se le devuelva el manejo de Tránsito Municipal, con la finalidad de que una mejor cercanía con el ciudadano y que se pueda llegar a concebir una mejor vialidad. Para ello, el mismo ayuntamiento de la ciudad, se ha estado preocupando por mejorar las vialidades de todo el municipio y las principales congregaciones que le corresponden.

Los accidentes que se han presentado a diario, algunos de ellos con grandes consecuencias, muestran que no hay una verdadera estrategia en este caso, por lo que es posible que atendido por el ayuntamiento, se pueda mejorar las condiciones del tráfico y sobre todo de la seguridad de los que transitan por las calles y por todos aquellos que conducen un vehículo.

Ya no debe haber ninguna clase de impunidad ni corrupción, que son los principales problemas por los que ha pasado la Dirección General de Tránsito del Estado, que permitió en el pasado que hubiera concesiones de transporte de agua por la calles, que aparte de destruirlas cotidianamente, se ha vuelto un negocio muy redituable, pues los vehículos en los cuales se transporta el vital líquido de las fuentes de agua que existen en Xalapa, son meras carcachas que no cuentan con las condiciones para circular por las calles.

Pero no será, sin duda, solamente estos casos, sino una revisión a fondo de todos los destartalados vehículos del transporte público. La corrupción ha impedido en el pasado que pudiera regularse esta actividad.

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COMIENZA A DESPERTAR la militancia del PRI, y ya se oyen algunos llamados a la unidad, sobre todo, para enfrentar el próximo proceso electora municipal.

Ya se oyen voces que piden las candidaturas de los principales municipios de la entidad, sobre todo, de aquellos que tienen presupuesto alto y que tienen más posibilidades de hacer algo en materia de beneficio social, así como también el interés del manejo de recursos económicos en grandes cantidades.

Como quiera que sea, el movimiento político interno del PRI, ya se nota y a seis meses, aproximadamente, se preparan para esta fiesta política que habrá, nuevamente, de mover a todos los ciudadanos veracruzanos, que una vez más serán llamados a las urnas para ejercer el sagrado derecho a votar.

Mientras tanto, los azules, seguros de su alianza, volverán a intentar el triunfo que les llevará a conseguir una buena parte de la tajada política en materia municipal, como un indicativo de lo que puede suceder en menos de años y medio para la sucesión gubernamental y presidencial.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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