La desastrosa actuación de Mariah Carey en Times Square, Nueva York, la noche de Año Nuevo seguirá siendo noticia, después de que el equipo de la diva haya culpado de su fiasco a la empresa que se hizo cargo del sonido.
«Son cosas que pasan. Que todos tengan un feliz y saludable año nuevo. Seguiré dando más titulares en 2017», aseguró Carey en un breve mensaje publicado en su cuenta de Twitter, junto a un vIdeo con una de sus características muecas.
Clark Productions, la compañía responsable de la producción del evento, está indignada con las acusaciones realizadas por la artista y estaría barajando interponer una demanda.
Los portavoces de Dirk Clark aseguran que la afirmación de la estrella acusándoles de sabotear la actuación del pasado es «difamatoria», y agregan también que es «escandalosa y francamente absurda».
Tal y como adelantó TMZ el domingo de Año Nuevo, el entorno de Mariah dijo que su auricular no funcionaba, pero ignoraron las advertencias e incluso condujeron falsamente a la cantante a creer que todo funcionaría bien cuando llegara al escenario.
«En muy raras ocasiones hay errores técnicos que pueden ocurrir con la televisión en directo, sin embargo, nuestra investigación inicial ha indicado que DCP no tuvo responsabilidad en el rendimiento de la señora Carey», dijo uno de los portavoces de la empresa, que añade que la cantate se negó a hacer una prueba de control de sonido y que había suficiente sonido en el escenario para que ella oyera perfectamente la música.
«Queremos ser claros, tenemos el máximo respeto por la Sra. Carey como artista y reconocemos sus tremendos logros en la industria», añadió Dirk Clark, buenas palabras aunque se estén planteando seriamente tomar acciones legales contra la neoyorquina.