El expresidente George Bush padre abandonó la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un centro médico de Houston (Texas), mientras que su mujer, Barbara, ingresada desde el miércoles en el mismo hospital, será dada de alta en las próximas horas.
En una rueda de prensa en el Hospital Metodista de Houston, el doctor Clint Doerr, especialista en neumología, explicó que el exmandatario está evolucionando «muy bien» al tratamiento pautado y que espera que el próximo fin de semana pueda regresar a su hogar.
Una neumonía en un paciente de 92 años es siempre una situación grave, pero el expresidente ha tenido una gran respuesta a la medicación que le dimos y por eso ha pasado a piso hoy mismo», apuntó Doerr.
Por su parte, la doctora Amy Mynderse, señaló que la ex primera dama Barbara Bush evolucionó correctamente al cuadro de fatiga y tos que experimentó el pasado miércoles y que en las próximas horas recibirá el alta médica.
De hecho, la esposa de Bush pudo ser dada de alta ayer, pero optó por quedarse un día más en el hospital para seguir con su recuperación y estar más cerca de su marido
La doctora Mynderse señaló hallarse sorprendida por «lo muchísimo que significan el uno para el otro» y relató que, aunque el matrimonio ha dormido en distintas habitaciones estos días en el hospital, la mayoría del tiempo lo han pasado juntos porque Barbara Bush iba a visitar a su marido.
El amor que existe entre ellos es increíble y lo mejor es que son realmente una terapia el uno para el otro, se cuidan mucho. Cuando su mujer se iba de su habitación, el expresidente preguntaba por ella y viceversa», relató la doctora.
Ambos médicos destacaron también el optimismo del exmandatario desde el momento en el que fue ingresado y apuntaron que, incluso en los días que estuvo intubado, los más complicados de su ingreso, levantaba los pulgares hacia arriba para mostrar su buena actitud.