«Ante la bancada de su partido en el Senado, el priista Enrique Ochoa volvió a ponerle el cascabel al gasto legislativo  al pedirles aprobar- antes de que termine mayo- la reforma para eliminar 100 diputaos y 32 senadores. La premura obedece a que, si no se hace en este periodo, ya no será posible aplicarla en la elección federal del 2018. y entonces la reducción del Congreso tendría que esperar hasta ¡2024! Falta ver si los demás partidos se comprometen con ese reclamo ciudadano o sí, como es costumbre, cada uno se planta en su propia propuesta… para que nadie avance ni un milímetro». Lo comentan en «Templo Mayor» de Reforma.