*Terreno de mil pesos, ahora tres millones

*Edsel Fano Montero, lo conocimos en 1976.

“Se registraron aspirantes de Coatepec para lo que sea”.

Alfonso Mora Chama

Algo tuvimos que encontrar. Después de lo agendado en Veracruz y Boca del Rio, recorrimos las calles de la tierra que ahora gobierna Miguel Angel Yunes Márquez, continuando con la etapa de progreso en este bello lugar turístico y amigable. A escasas cuatro cuadras de palacio municipal que luce moderno y con su majestuosa fuente, encontramos a un “sotaventino”, característico tono de esta zona para invitarnos a tomar asiento, llevando ya una silla blanca de marca cervecera.

Le dijimos que lo acompañaríamos a sentarnos en las afueras de su casa, de su hogar en donde se escuchaba la voz de la señora y uno de sus hijos que acababa de llegar. Iniciamos una charla ante un clima y viento agradables.

“Mire amigo…esta casita que tengo, cuando lo compré como terreno me costó mil pesos, ahora tiene un valor de tres millones. El de allá enfrente, el que tiene esa lona que dice que se vende, cuesta tres millones, como esta casa junto a la mía, se está cayendo y vale lo mismo, tres millones. Le hablo amigo de hace cuarenta años, cuando adquirí el terreno en mil pesos”.

.Usted ya conocía Boca?…me pregunta y de inmediato le digo:

“Amigo aquí he estado infinidad de veces, a veces en asuntos de trabajo, en otras en visita de descanso y en otras acompañando a don Rafael Hernández Ochoa, como en diez ocasiones, llegaba seguido al negocio “Pardiños”…ya llovíó amigo, le hablo de 1976, por cierto, cuando el jefe de acción social con don Rafael Murillo Vidal, Edsel Fano Montero, iniciaba como candidato a la alcaldía de Boca del Río…”.

-Qué cosa?.

-Fíjese amigo que yo trabajé con Edsel Fano en el palacio municipal. Un tipo alto, flaco, siempre de gafas oscuras.

-Así es…le dije al amigo ocasional, amable, curioso.

-Pues si estuve aquí con Edsel, me invitó y vine a acompañarlo. Después regresaba seguido con don Rafael Hernández Ochoa, cuando gobernaba Veracruz, y años más, conocí aquí a un personaje de un negocio de mariscos, principalmente de ostiones en su concha, “Panchito”, que a todos los clientes encabronaba porque usaba lentes…nada extraño quizás, pero este cabrón los usaba siempre, siempre, en la cabeza.

-Sabe amigo que también traté diferentes alcaldes de aquí, entre ellos a Sergio “Patuleco” Flores Armida, al abogado Avelino Muñiz García, fue mi maestro en la Facultad, en la materia de Derecho Internacional; a Ramón Ferrari Pardiño, Raúl Ramos Vicarte, Armando López Rosado y uno más, a Ubaldo Flores Alpizar…

-Todo cierto amigo….los conocí, con todos tuve trato amable.

Agrega de su familia:

-Mis hijos integran un grupo jarocho. Se llama Boca del Río, ellos rascan el requinto, la jarana…tocan chingón, son muy solicitados.

-Su hijo Tony Domínguez, sale a comentarnos:

Nuestro grupo se oye bien, le echamos ganas y la alegría que nos identifica, ya no se llamará Boca del Río, ahora nuestro son jarocho se llamará “Pasión Veracruzana”. También mi hermano Juan Carlos está con nosotros.

Mis amigos me alcanzar, hora de la comida y al despedirnos de los amigos boqueños, el apretón de manos y me dice:

-Soy Miguel Angel Domínguez Castro, y cronista de la ciudad de Boca del Río.

-Chingaos, chingaos…que guardadito lo tenia.

-Yo me dedico al periodismo don Miguel Angel, estudié aquí en Veracruz, hace 46 años…ahora trabajo en Coatepec, Xalapa, el distrito coatepecano.

-Mire lo que son las cosas…agrega el cronista de Boca, conocí y traté con dos grandes periodistas de El Dictámen. Fueron Alfonso Valencia Ríos y Bartolomé Padilla.

–Pues mire lo que son las cosas, – se la repetí, como la canción de Los Socios del Ritmo – el periodista Alfonso Valencia, fue mi maestro en la Facultad, fue director de ella y a Bartolomé, si lo conocí y su “Consenso” que lo leí en sus edciones.

-Le comento al cronista:

“De Bartolomé Padilla, recuerdo una columna de mi compañero de la Facultad, Luis Velázquez, en donde asegura y cierto es…que Bartolomé fue un virtuoso del periodismo, lo mismo escribía un reportaje, una columna o una entrevista, una crónica, y así como lograba que sus palabras bailaran en su texto, también se bamboleaban al ritmo de la frase cachinda y fulminante, como también sus palabras tocaban el corazón…y las neuronas.

Sus frases fueron relámpagos en la oscuridad. Infartaban al político poque parecían sentencias bíblicas. Asi escribía Bartolomé Padilla, le diría a don Miguel Angel Domínguez.

Fue un virtuoso del periodismo”.

Fue de esta manera como sin programarlo, logramos este tema para la columna, aplicando lo dicho por mi maestro Alfonso Valencia Ríos….que en el periodismo siempre existe la noticia, y cuando no la hay, eso es noticia.

Salimos de este lugar “Río Banderas” llamado así por los conquistadores españoles, en 1518 y ya en 1988 adquiriendo su designación actual de ciudad de Boca del Río.

Remate:

Como el Monje Loco…

Nadie sabe, nadie supo…

Comude Coatepec, lo toco

Por irresponsable y bruto.