La ex secretaria de Estado de Estados Unidos, ex primera dama y ex candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, criticó hoy los recortes solicitados por el presidente estadunidense Donald Trump en el sector de la diplomacia y la ayuda al exterior, en su petición presupuestal 2017.
Clinton, quien no ganó la Presidencia del país en las elecciones pasadas pese a haber obtenido el mayor número de votos populares, sostuvo que los recortes propuestos por Trump, tendrán el efecto de erosionar la seguridad y la presencia de Estados Unidos en el mundo.
“Estamos viendo un cambio que debería alarmarnos. Esta administración propuso recortes a la salud y a la diplomacia que serían un golpe a las mujeres y niños, y un gran error para nuestro país”, afirmó Clinton durante un foro en la Universidad George Washington.
“Darle la espalda a nuestra diplomacia no nos hará un país más seguro”, recalcó la política demócrata durante un premio bautizado en su honor en el Instituto para las Mujeres, la Paz y la Seguridad, de la institución.
El presidente Trump propuso un recorte de unos 10 mil millones de dólares o 29 por ciento al presupuesto del Departamento de Estado y de la Agencia para el Desarrollo de Estados Unidos (USAID) para el año fiscal 2017.
Clinton, quien protagonizó el año pasado una intensa campaña contra el entonces candidato presidencial republicano Donald Trump, recibió fuertes aplausos tras hacer un comentario en el que ironizó con declaraciones de miembros del primer círculo de colaboradores del mandatario.
“Las mujeres no son inherentemente pacificas, eso es un estereotipo. Eso pertenece a la realidad alternativa”, dijo la también ex senadora por Nueva York.
Su comentario pareció aludir a declaraciones de la asesora presidencial Kellyanne Conway que provocaron una polémica nacional cuando defendió que los funcionarios del gobierno del presidente Trump usen “hechos alternativos”.
La ex primera dama se ha mantenido mayormente fuera de la escena pública desde las elecciones del 8 de noviembre de 2016, aunque asistió con su esposo, el ex presidente Bill Clinton, a la toma de posesión del presidente Donald Trump el 20 de enero pasado.