Las cosas internacionalmente ya estaban mal, antes de Trump, ahora con él ocupando la Casa Blanca todo indica que va para peor.
Existe mucha información al respecto que no se maneja abiertamente en los medios de comunicación tradicionales, pero si la encontramos en algunos otros que procuran dar cabida al análisis de relevantes especialistas en el tema, con un enfoque profundo y sin limitaciones.
Uno de estos investigadores es John Pilger quien considera, al igual que el Papa, que tercera guerra mundial ya comenzó.
En lo particular me he dado cuenta que algunas personas, creo que la mayoría, a pesar de escuchar los sonidos de los tambores de guerra, no se han percatado de esto, o simplemente, haciendo lo del avestruz, no quieren aceptar esta triste realidad.
Ahora bien, en descargo del actual ocupante del trono imperial, tenemos que reconocer que cuando llegó, ya el horno no estaba para bollos, lo único que ha hecho es echarle más leña a la hoguera.
Hillary Clinton y Obama, siguiendo los dictados del sionismo internacional, continuaron con la tarea que ya habían iniciado los Bush, uno con el pretexto de recuperar Kuwait y el otro con el de vengar el derrumbe de las Torres Gemelas, el asunto es que, conjuntamente con el Clinton presidente, los primeros, y entre todos, asesinaron a Sadam Husein y a Muamar el Gadafi, y lo mismo quisieron hacer con Bashar al-Asad en Siria hasta que se le atravesaron los rusos aliados con los chinos.
Todos estos últimos presidentes imperiales, debido a sus beligerantes acciones, y premeditadas consecuencias, le dieron origen al monstruoso y artificioso estado islámico, que con la satanizada Corea del Norte, tienen a todos los habitantes de este planeta con el Jesús en la boca.
Más allá de esto, se encuentran otros conflictos donde la misma mano mece la cuna.
En total son más de diez países los involucrados en una guerra, ya no tan silenciosa y sorda, que, según el Papa, han venido dando cuerpo, por partes, a la tercera conflagración que es, y será, totalmente diferente a las otras dos que le antecedieron.
Por otro lado, el analista mencionado al inicio de esta colaboración, basa su relato en la agresión de Estados Unidos en la región de Asia-Pacífico por el contencioso de las islas Sengaku. Los últimos reportes hablan ya de más de 100 buques chinos de guerra en la zona en conflicto capaces de enfrentarse a parte de la Armada de los Estados Unidos ubicada en la región.
En las zonas limítrofes de Camboya, Vietnam y Filipinas se encuentran congregados numerosos armamentos del país de China enfrentados a los intereses de los Estados Unidos y esta situación, sumada a la belicosidad imperante del líder de Corea del Norte que ya ha amenazado reiteradamente con un ataque nuclear preventivo a los Estados Unidos y Corea del Sur, son los prolegómenos de una tercera guerra mundial que recién comienza y de la que no se han percatado o no han querido hacerlo los medios noticiosos tradicionales
Para el analista John Pilger la chispa que incendiará totalmente esta tercera guerra mundial surgirá de la región de Asia-Pacífico y significará una guerra entre China y los Estados Unidos, pero su inminencia es tan evidente que no podemos hablar sino de encontrarnos todos sumidos avocados a sus comienzos.
Se puede entender que por la dimensión del conflicto y su alto coste económico y en vidas humanas la prensa mundial sea renuente a dar mayor información, por otro lado también es comprensible que el interés de la población por el recorrido de las noticias se haya centrado más en la región de Oriente Medio tratando de ignorar la de Asia-Pacífico.
Fue en septiembre del 2016 que Tarek Ahmad, del Partido Nacional Socialista sirio afirmó que la guerra en Siria ha alcanzado un punto de no retorno, ya que la intervención extranjera ha convertido la situación en un caótico desorden.
Agregó que Siria es solo un frente en la Tercera Guerra Mundial librada por Washington y sus aliados.
En conversaciones con Sputnik, el representante del partido declaró que la situación militar en el país ha llegado a un punto de no retorno, y que la crisis política solo se ha intensificado debido a la intervención de varias fuerzas regionales y globales ‘no invitadas’.
Al comentar la intensificación del conflicto entre Damasco, sus aliados y EEUU tras el ataque contra las fuerzas gubernamentales sirias en Deir Ezzor, Ahmad advirtió que es muy importante comprender que la posición de EEUU en Siria es táctica, y no estratégica. «El objetivo de EEUU no está limitado en Siria», subrayó.
«El frente sirio no es el objetivo final. Debemos observar la situación de manera objetiva y admitir que una Tercera Guerra Mundial se está librando en Siria, y esta guerra está librada por EEUU y sus aliados, aun cuando estos aliados sean, al mismo tiempo, víctimas. El objetivo principal de Washington es controlar cualquier potencia mundial que les amenace. Así, EEUU está librando una guerra contra estas potencias, entre ellas, China y Rusia», afirmó.
Todo lo demás es un pretexto considero yo.