«Y, al final, Donald Trump se quedó sin muro. Al menos hasta anoche, el acuerdo entre republicanos y demócratas era no asignar un solo dólar a la construcción de un de las principales promesas del güero. Sin embargo, cuando al mandatario estadounidense le entra la frustración ¡agárrense! Por suerte en este momento anda entretenido con lo de Corea del Norte. Pese al revés en El Capitolio, la Casa Blanca ya dijo que insistirá en la idea de levantar el muro fronterizo. Y que si no es éste, será el próximo año». Lo comentan en «Templo Mayor» de Reforma.