Corea del Norte pidió hoy al nuevo presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, acabar con las políticas de “confrontación” intercoreanas, incluidos los ejercicios militares conjuntos, que cada años efectúa con Estados Unidos.
«Las dos Coreas deberían respetarse mutuamente y abrir un nuevo capítulo para avanzar hacia delante, mejorar sus lazos y (lograr) la unificación intercoreana», afirmó el diario norcoreano Rodong Sinmun, a un día de la juramentación de Moon como nuevo presidente de Corea del Sur.
En un editorial, el periódico dijo que Corea del Sur debe acabar con las políticas de “confrontación” y sus ejercicios militares anuales conjuntos con Estados Unidos, los cuales, según el régimen norcoreano, son “un ensayo para una invasión del Norte”.
El Rodong Sinmun, diario oficial del Partido del Trabajo de Corea, también instó al nuevo mandatario surcoreano a prohibir a los activistas de su país enviar panfletos críticos contra el régimen norcoreano a través de la frontera conjunta.
Los activistas surcoreanos, en su mayoría desertores norcoreanos, han enviado frecuentemente globos de plástico con los mencionados panfletos para suscitar la resistencia interna contra el régimen de Kim Jong-un.
Se estima que el presidente Moon busque mejorar las tensas relaciones intercoreanas, pese a que el programa nuclear y de misiles del Norte está limitando para las políticas de reconciliación, según reporte de la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
Durante el período de campaña electoral, Moon se comprometió a seguir un enfoque de doble vía: para presionar a Corea del Norte hacia su desnuclearización, al tiempo de buscar el diálogo con Pyonyang .
El nuevo presidente de Corea del Sur dijo la víspera tras su toma de protesta, que podría visitar a la vecina Corea del Norte, bajo las circunstancias correctas, para dialogar sobre los programas norcoreanos nucleares y de misiles.
El diario norcoreano criticó los recientes ejercicios militares conjuntos de Corea del Sur y Estados Unidos, de dos meses de duración, reiterando que la medida es un ensayo para la guerra o la invasión del Norte.
Asimismo, el régimen de Pyongyang dijo que se debe minimizar la tensión militar en la península coreana, solicitando medidas para reducir los riesgos de conflicto cerca de la frontera y en las disputadas aguas del mar Amarillo.
«Las dos, Corea del norte y Corea del Sur deben buscar diálogo y las negociaciones en varios niveles», subrayó el Chosun Sinbo, que dio una amplia cobertura a la elecciones presidenciales surcoreanas.