El nuevo museo Frost de Ciencias de Miami es un sueño hecho realidad para los amantes de los ecosistemas, la biología marina y la astronomía.
El edificio construido en un área de 22 mil metros cuadrados, junto a enormes rascacielos en el centro de la ciudad, tuvo un costo de 305 millones de dólares y se ha convertido de inmediato en una atracción más para los miles turistas que visitan a diaro este polo turístico.
El museo inaugurado la semana pasada fue creado gracias a los filántropos Philip y Patricia Frost y es una aventura para descubrir y explorar los inventos de la ciencia, los secretos de la Tierra y el Sistema Solar, así como la diversidad geológica y biológica del planeta desde el origen de la vida hasta la actualidad.
Lo que más llama la atención a simple vista es la enorme cúpula blanca del Planetario, una edificación de 20 metros de ancho y que cuenta con tecnología de punta que sólo pocos poseen en el mundo con un proyector de resolución 8K que permite una gran nitidez cuatro veces superior a la de televisores actuales y efectos de tercera dimensión.
El licenciado en astrofísica de la Universidad Internacional de Florida, Jorge Pérez, gerente del planetario, dijo a Notimex que la instalación les permite hacer shows en vivo en “los que pueden llevar a la audiencia en un viaje a tráves del cosmos en tiempo real” y en el que el visitante se “sumerge” en una experiencia visual y de sonido que cubre toda tu visión periférica.
Pérez dijo que esperan también abrir la instalación en el futuro a la comunidad para se convierta “en un camino para seguir innovando en el mundo de los planetarios”.
Pero la máxima atracción será sin duda el enorme Acuario de tres plantas que contiene 1,8 millones de litros de agua, con un gran “ojo” de cristal donde sepueden observar especies marinas como el tiburón y la mantarraya.
Este complejo simula una inmersión en la “Corriente del Golfo”, así como una gran variedad de botánica, especies autóctonas y recrea una decena de hábitats del sur de Florida: desde la costa con sus bosques, manglares y playas, a los arrecifes coralinos de los cayos y el humedal de los Evergaldes.
“Somos un acuario y museo muy único porque tenemos el museo de ciencias con el acuario, además del planetario. Combinamos mucho el aprendizaje y la investigación, pero también como una atracción en donde se pueden ver animales, conocer un poco de los everglades estando en un edificio en el centro de la ciudad”, dijo el biólogo cubano Fernando Bretos, responsable del acuario.
El recorrido por las instalaciones del acuario sumerge al visitante en sus tres plantas: “La vista”, “La profundidad” y “La inmersión” en el rico y variado hábitat del sur de Florida.
El complejo cuenta además con la exposición didáctica “Feathers to the Stars” (De las plumas a las estrellas), en la que hace un recorrido por los primeros dinosaurios con plumas hace 125 millones de años (que no volaban), hasta la era de las naves espaciales.
Este museo se suma en el mismo predio al Museo de Arte Pérez y a unas calles al Centro de Artes Escénicas Adrienne Arsht, un trípode de instituciones que amplía la oferta cultural de Miami.