*De Jairo Calixto Albarrán, Milenio: “Como diría el gran maestro Hector Lechuga, pellizquito de pulguita socarrona por la SCT que está cabrona. ¡Chúpale Pichón!. Camelot.

TRES EN UNA (LLEGA DUARTE)

El gobernador de Veracruz cambia al secretario de Finanzas. Llega el cordobés Guillermo Moreno Chazzarini, a quien todos ven como una crónica de un alumbramiento anunciado, pues se cree que será, si la elección lo lleva allí, el secretario de Miguel Angel Yunes, pero Márquez (Chiquiyunes) La extitular, Clementina Guerrero, cuentan los sanedrines de la tribu, que ya estaba harta que le cantaran todas las mañanas: toma chocolate y paga lo que debes. Del ‘no hay cash’ al ‘ahí se ven’. Historia cíclica. Cambia también al Contralor, Tomás Figuerola Piñera, Es la semana que llega JDO de Guatemala. Ricardo Alemán, en Milenio, escribe este domingo que podría salir libre, porque las acusaciones son muy endebles, mas con el nuevo sistema penal. Pero Miguel Angel dice que nanáis, que lo tiene bien trabado, término callejero. Lo que se da como un hecho, es que los procesos de Desafuero contra los priístas, Alberto ‘Cisne’ Silva y Tarek Abdalá, no caminen por la senda de la justicia. El PRI los cobija, ya le dieron la cabeza de Duarte, me dijo un encumbrado dinosaurio, ya no habrá más.

EXPRESIDENTES Y LOS JARRONES CHINOS

Un viejo refrán o chiste, dice que los expresidentes son como los jarrones chinos, muy valiosos pero no se encuentra lugar donde ponerlos. Ha ocurrido con varios en la historia de los países y de la humanidad. Felipe González, de España, que es y fue tipo hábil y buen presidente, y asesora a Carlos Slim cada que se lo pide, dijo de eso un día: “’Somos como grandes jarrones chinos en apartamentos pequeños. No se retiran del mobiliario porque se supone que son valiosos, pero están todo el rato estorbando”. Jimmy Carter (1 de octubre de 1924 (edad 92), el cacahuatero, era tan débil presidente y un día llegó a México y José López Portillo lo trató como si fuera su empleado, sin respetar el poderío de esa presidencia del mundo, fue mal presidente, pero después de servirle a su patria se acomodó como veedor de elecciones mundiales y ese trabajo se le reconoció por el mundo, ayuda a construir casas de Hábitat para la humanidad. Hasta las mismas Naciones Unidas lo convalidaron y reconocieron. Toco el tema porque en México tenemos un jarrito chino, Vicente Fox Quezada, cuando llegó y derrumbó 8 mil años de priísmo, todos, hasta los mismos priístas, pensaron que cimbraría el espectro político y vendrían los cambios en cascada, como caída de fichas de dominó. Qué va. Fue una desilusión, se dedicó a alabar a Martha, su capullito de rosa, y a gozar los seis años que la patria le dio la oportunidad de abrir y acabar con la corrupción, y creo que hasta la catapultó, o la aupó, la elevó y creció al amparo de los negocios de los hijos de su mujer. Fue tan real su mal desempeño, que hace poquito un panista en un mercado le gritó sus verdades, que fue un presidente malo, que jamás limpio la casa y por eso ahora está tan contaminada, que uno ve la desfachatez del secretario de SCT, Gerardo Ruiz Esparza, mofándose de la tragedia de su dependencia, donde cayeron dos inocentes muertos, padre e hijo, y con descaro diciendo que él no renuncia, porque sabe, como se lo escribió el semanario Proceso, que es uno de los consentidos del presidente Enrique Peña Nieto (Algún amigo, cierta vez me comentó que este sujeto, el killer Gerardo Ruiz Esparza, es buenísimo para cantar en las fiestas privadas, que las de José Alfredo y los boleros de Álvaro Carrillo los canta chingón, quizá así agarró la chamba con el gobernador Peña Nieto en el Edomex, que desde esa fecha lo trae como su pilmama, y ni siquiera, ahora que medio México le pide su renuncia, el presidente se despeina por mandarlo a que cante a los camiones y pida propina, como músico urbano camionero, ay este país surrealista). Vicente Fox, que entre sus cosas malas ha tenido la buena de ser un crítico de lo que pasa en Venezuela, ahora, como Jimmy Carter, va de observador a ese país, que pretende elecciones para perpetuar a ese sujeto dictador que los gobierna, en una Asamblea Constituyente, que el mismo Peje AMLO se ha negado a denunciar públicamente los atropellos y muertes, y eso le ha valido a Andrés Manuel que muchos desconfíen de su forma de actuar políticamente, porque si se está con Maduro de la mano, es como andar con el Diablo en días Santos, solo que vea el desastre de ese país petrolero y dónde anda la inflación y la carestía. Bien por Vicente Fox. Mirará y verá y seguro denunciará, porque lo hace junto a un grupo de respetados expresidentes latinoamericanos. Ve solo, Chente, no lleves a Martha.

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