«Desayunaría en La Pérgola una arrachera con picaditas y pan crujiente con ese rico aderezo,y salsa de chile. Comería en El Tío Yeyo una trucha al chile limón con varias cervezas. Cenaría en La Paz de María unas chuletas de cordero con un buen vino. Y al otro día la curaría en La Cevichería con un pozole verde de camarón y un agua chile». como decía Clavillazo: «nomáaaaaaaas».