En la operación «hacer a un lado a Monreal», en ninguno de los eventos dio la cara Andrés Manuel López Obrador. A cambio de posiciones futuras, acordó con Martí Batres y Mario Delgado, que después de darse a conocer el resultado de la encuesta de inmediato expresaran su aceptación, y al siguiente día en reunión pública de aspirantes le manifestaran su apoyo a Claudia Sheinbaum. AMLO maniobró todo «desde la sombra». La «encuesta» ni siquiera se mandó a hacer con una empresa especializada, fue interna. ¿Ese es el AMLO que sus miles de fans piensan que va salvar a México? Y no es que Monreal sea un santo ni nada parecido, pero todas las encuestas externas señalaban que iba delante de todos. Muchos piensan que esta forma de actuar de AMLO, poco transparente e inquitativa, le va a restar varios puntos…. Y que se va a volver a quedar en la orila, por tercera vez.