Lo peor que puede suceder con una tragedia es que se politice. Desgraciadamente eso está sucediendo después del sismo del 19 de septiembre.

Ante el desastre ocurrido principalmente en la Ciudad de México (porque seamos sinceros, si no hubiese ocurrido en la capital, no se le hubiera dado la trascendencia que se le dio), todos los partidos se “humanizaron” ante la presión social y plantearon diversas iniciativas para ayudar a la reconstrucción del país.

Recordemos lo que dijeron los dirigentes posteriormente a la tragedia:

PRI.- Quitar recursos a partidos así como eliminar legisladores federales y locales plurinominales.

PAN, PRD, Movimiento Ciudadano.- Quitar recursos a partidos, menos propaganda del gobierno así como reducir sueldos a funcionarios.

Morena.- Quitar recursos a partidos, reajustar el presupuesto 2017-2018, reducir dinero del INE así como eliminar el fideicomiso del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Nueva Alianza.- Reducir financiamiento público a partidos y asignarlo según votos federales.

Partido Verde Ecologista de México.- Eliminar financiamiento público a los partidos.

Desde luego que sus declaraciones fueron en caliente, porque a unas semanas de la tragedia, como que ya se les olvidó el asunto de renunciar al financiamiento público. Así lo hicieron ver los diputados federales en la sesión del pasado martes, cuando terminaron a jalones y todo por querer obligar a sus opositores partidistas a cumplir con lo que habían declarado públicamente.

Pancartas individuales con fotos de los dirigentes Ricardo Anaya, Alejandra Barrales y Andrés Manuel López Obrador, con las leyendas: “Alejandra Puro Rollo #FirmaYa”, “No seas Canaya #FirmaYa” y “AMLO no seas lagarto #FirmaYa”, provocaron que los diputados protagonizaran tremendo zafarrancho. ¿A poco no es una desgracia la actitud de los diputados?

Lo más interesante de todo esto es que a pesar de que “todos”, “todos” están de acuerdo en renunciar al financiamiento público no lo han hecho. Entonces… ¿aquellas declaraciones qué fueron? Desgraciadamente pura demagogia partidista.

A partir de las declaraciones políticas posteriores a la tragedia, las opiniones no han dejado de escucharse en todos los sectores sociales: “¡Que sí deben tener dinero público!”, “¡Que sí deben renunciar!”, “¡Que se infiltrará el Narco!” Esta última expresión es la que “preocupa” supuestamente a todos, ya que el argumento principal en contra es que el dinero del narco ahora sí se mezclará con los candidatos. ¡Por Dios! tiene tiempo que existe esta mescolanza. Incluso, en el último proceso electoral para seleccionar a los alcaldes en Veracruz, no faltó quien dijera que uno de los futuros alcaldes era narco. ¿Y acaso alguien se ocupó de ello?

Aunque lo que me tiene desconcertada es ¿Por qué los partidos están renunciando al financiamiento con dinero público y algunos ciudadanos están defendiendo a los partidos?

Esto ya está patas arriba ¿no es lo que querían los ciudadanos? O ¿acaso es algo parecido al fuego amigo?

Si pensábamos que la tragedia nos había traído solamente solidaridad entre la población, en realidad ha destapado la corrupción en los procesos de construcción, el discurso mentiroso de los políticos y la falta de transparencia en las aportaciones a los damnificados, y para colmo, la rapiña a los afectados.

Si así estamos a menos de un mes que ha terminado la búsqueda y el rescate ¿cómo estaremos cuando se ejerzan los recursos donados? Recuerde que la reconstrucción coincidirá totalmente con el proceso electoral federal.

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@NumerosRojos_BC