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Soy un optimista sin remedio –no confundir con un buen hombre o nada que se le parezca-. Hay cosas que de que me entusiasman, me entusiasman. Y más si se trata de cosas relacionadas con todo aquello que beneficie, directa o indirectamente, a Veracruz.
Y lo anterior lo comento porque me llena el ojo la instalación en el municipio de Emiliano Zapata de la armadora de automotores china Baic, que en realidad debería de ser B.A.I.C., que son las siglas de Beijing Automotive Industry Holding Co., Ltd., conocida también como Grupo BAIC o más coloquialmente hablando como Beiqi. Entre paréntesis comentaré que algunas firmas automovilísticas mundiales, sus marcas responden a las siglas de los consorcios o sociedades mercantiles que las fundaron originalmente, así la española SEAT es Sociedad Española de Automóviles de Turismo, la FIAT italiana es Fábrica de Automóviles de Torino, e inclusive la coreana KIA en realidad es Kyungsung Precision Industry.
Y ¿por qué ese entusiasmo desbordado de mi parte?, bueno, porque miren, una empresa de esos tamaños, China para empezar, tiene un gran futuro en el mercado mundial de automóviles, y representa, potencialmente hablando, en primer lugar, muchos empleos para la región, que impactarán definitivamente a Xalapa y a su entorno directo. BAIC ahora es una armadora, pero por algo se empieza. Así empezaron la Volkswagen en Puebla, la Nissan en Morelos, la General Motors en el estado de México y casi todas esas grandes industrias que hoy en día emplean a miles de mexicanos.
La verdad es que hace rato que el que esto escribe superó la discusión del contenido ideológico de las administraciones públicas. Por supuesto que tengo mayores simpatías por unos u otros partidos y rechazo por sistema a otras formaciones políticas. Pero hoy me fijo antes que en siglas en las personas, y espero de ellas un buen gobierno de resultados tangibles, una buena gestión pública, honradez y honestidad y conocimiento de los terrenos que pisan. Luego entonces, yo no sé quién le haya abierto las puertas a los chinos, pero quien lo haya hecho, para él y su gobierno todos mis respetos.
Viajo cuando menos dos veces por semana de Xalapa a Veracruz, y me lleno de ilusión cada vez que paso por el armatoste conocido coloquialmente como el armadillo. Ya se ve movimiento, ya se nota una dinámica inusual en su entorno, ya se ven perfectamente agrupadas las carrocerías de los autos en su patio de maniobras, con las cajas de cartón que, supongo yo, contienen todas sus autorpartes. ¡Carajo!, nada más hay que acordarse lo que era la alemana Volkswagen cuando se instaló sobre los terrenos adyacentes a la autopista Puebla-México.
Y bastaría preguntarse qué sería de Puebla hoy en día sin esa factoría. La riqueza que ha generado entre los poblanos es inconmensurable, y la demanda de mano de obra especializada no termina, desde administrativos hasta personal técnico. Los últimos escarabajos que circularon por todo el mundo estaban fabricados en la planta de Puebla. Un último comentario para que nos ayude a comprender esto de lo que estoy hablando, cuando viajen por el estado de Guanajuato en carro, en la autopista que une a la capital con Silao y Celaya, no exagero, pero se respira empleo y bienestar gracias a las 5 o 6 empresas automovilísticas ahí instaladas.
Y finalmente, me siento profundamente consternado y triste por los últimos acontecimientos en los que se vieron involucradas las familias Ahued Bardahuil y Nemi Dib. Tanto don Ricardo como Juan Antonio son mis amigos y ¡claro que lamento su circunstancia!
Felices fiestas para todos los lectores de este su portal, en especial para todos aquellos que me han hecho el favor de seguirme en los últimos 5 años. Por aquí me estarán leyendo todavía en esta que será la última semana del año.
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@marcogonzalezga