En la víspera del cierre de las precampañas presidenciales, Andrés Manuel López Obrador contó a Grupo Imagen, de manera exclusiva, cómo es su vida familiar en esta, su tercera precampaña presidencial.
—¿Es cierto que el más pequeño de tus hijos es el más rebelde, aunque muy inteligente?
—Es opositor, pues como son los niños, son los jóvenes y tiene criterio propio y se le respeta.
—Te hace tomar decisiones?
—Sí, sí (…).
—Te saca canas verdes?
—Blancas, sí, salió a la mamá, es muy terco como la mamá. En la casa, en la familia me hacen motines emocionales cuando tardo mucho en verlos, sí, hay huelgas y motines emocionales, y de todo: manifiestos, pliegos petitorios…
—¿Y accedes como politólogo que eres?
—Sí, cómo no (…). Tengo la bendición de que mis tres hijos grandes se han portado muy bien.
Gracias a la estabilidad emocional que le da la armonía familiar, López Obrador asegura estar bien y de buenas para enfrentar los retos nacionales.
—¿Sabes cocinar?
—Sí, lo elemental (…) Hago de todo, no me dejan mucho porque dicen que dejo mucho tiradero en la cocina, ya vez también las mujeres tienen sus cosas, pues sí y dicen: no, no, no queremos tiradero, tú no te metas en esto, pero sí cocino y me gusta.
De llegar a ser presidente de la República, estima que su vida no cambiará tanto: “Que no cambia nada, que vamos a seguir siendo los mismos”, dijo.
En la segunda entrega de esta entrevista, el puntero en las encuestas presidenciales habla de su posición frente al terrorismo, su compromiso de bajar la tasa de homicidios en México y el trato que ha recibido en los retenes que no forman parte de la autoridad.